Congelar losalimentoses una de las formas más efectivas para conservar las distintas comidas, ya que este detiene el crecimiento de microorganismos que puede causar su descomposición.

Desde carnes hasta legumbres, la mayoría de los alimentos pueden estar en el freezer durante un determinado tiempo, excepto un tipo de dulce que no se congela. Conocé cuál es y por qué no queda congelado.

¿Cuál es el único dulce que no se congela?

Si bien puede estar en un freezer o congelador durante un año y no perder sus propiedades, el dulce de membrillo no tendrá escarcha ni estará cristalizado como el resto de los alimentos.

El dulce de membrillo conservará su textura gelificada y brillo a pesar de haber pasado un año dentro de un freezer. Además de que se podrá cortar muy fácilmente, sin la necesidad de tener que esperar que se descongele para hacerlo.

Dulce de membrillo: cuál es la explicación científica de por qué no se congela

Al momento de preparar un dulce de membrillo se utiliza al menos un 33% de azúcar sobre el peso final. Según explica un artículo científico del biólogo y divulgador Álvaro Bayón, los alimentos que cuentan con sustancias disueltas en el agua, como el azúcar, su congelamiento puede variar y no necesariamente se dará en grados bajo cero.

Esto significa que uno de los factores por los cuales el dulce de membrillo no se congela se debe a la gran cantidad de azúcar que tiene su preparación. Pero no es el único motivo.

El segundo factor que impide el congelamiento es su estructura tridimensional. El dulce de membrillo tiene una textura gelatinosa, espesa y densa, pero también suave al tacto. Esta última característica se debe a que tiene pectina, un polisacárido que está presente en las frutas de forma natural.

Este polisacárido reduce en gran medida la movilidad de las moléculas de agua en el dulce de membrillo y por eso no se congela.

En el dulce de membrillo, el agua está retenida por la intrincada red de pectinas, por lo que no queda gas disuelto. Este fenómenose conoce como superenfriamiento, en el cual el alimento se mantiene en estado líquido aunque se encuentre en grados bajo cero.