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La avena es uno de los mejores alimentos para consumir en el día a día, ya que es un cereal que aporta tanto carbohidratos como proteínas. Sumarla al desayuno es clave para llenar el cuerpo de nutrientes y aprovechar todos sus beneficios.

Al ser un carbohidrato complejo, libera energía de forma gradual, lo que genera una sensación de saciedad por mayores periodos de tiempo.

¿Cuáles son los beneficios de comer avena en el desayuno?

Diversos nutricionistas afirman que el desayuno es la comida más importante del día, ya que es la primera ingesta de alimentos tras el descanso.

En este contexto, sumar la avena puede ser un gran aliado por los carbohidratos que aportan. En la misma línea, cuenta con otros nutrientes esenciales como proteínas, vitaminas y minerales que garantizan el correcto funcionamiento del organismo.

Otro de sus beneficios es su aporte de antioxidantes, los cuales potencian la circulación de sangre en el organismo y previenen el daño generado por los radicales libres.

Otros beneficios de comer avena

El cereal también puede ser incluido en otras comidas y está relacionado con los siguientes beneficios:

  • Regula el colesterol: su alto aporte en fibra y betaglucano facilita la eliminación de la grasa
  • Retrasa el envejecimiento: reduce la inflamación del organismo y previene el daño generado por de los radicales libres
  • Potencia el tránsito intestinal: mantiene el microbioma intestinal saludable
  • Alimento completo: cuenta con vitaminas, proteínas y minerales

Cómo preparar la avena para aprovechar todos sus nutrientes

La forma más popular de preparar la avena es dejándola reposar en un recipiente durante toda la noche. De esta manera, a la mañana se tendrá un desayuno nutritivo.

Ingredientes:

  • Media taza de avena (de preferencia la tradicional, no la instantánea)
  • Media taza de leche (de vaca o vegetal)
  • Miel
  • Semillas (chía o lino)
  • Frutas frescas como banana, frutillas, manzana
  • Frutos secos como nueces, almendras, entre otros

Preparación:

  1. En el recipiente añadir la avena para que quede en fondo
  2. Agregar la leche y remover
  3. Añadir frutas, frutos secos y las semillas
  4. Integrar todos los ingredientes con una cuchara
  5. Dejar reposar en la heladera