El informe de Barclays sobre Argentina en su título refleja lo que percibe el mercado de corto plazo: "peor antes de que se ponga mejor". El análisis versa sobre la performance de los bonos argentinos en dólares, pero centrado en los factores domésticos, con las miradas puestas en las elecciones presidenciales y los riesgos de lo que suceda el día después, el lunes 23 de octubre.
"Rebajamos la calificación de Argentina de "market weight" (esta calificación indica que el riesgo crediticio actual de un instrumento está en línea con las expectativas del mercado) a "under weight" (prevé que el desempeño futuro sea inferior). Las elecciones primarias han traído nuevos riesgos que podrían ejercer presión adicional sobre el complejo", señala la entidad financiera.
"Las primarias cambiaron la narrativa del mercado. Las elecciones primarias no son concluyentes sobre el resultado de las elecciones presidenciales, pero cambiaron el panorama: llevaron a los mercados a tomar la opción de Javier Milei (y la dolarización) como una posibilidad real; a reducir las chances de Juntos por el Cambio; y a sacar a Larreta de la carrera presidencial. No hubo sorpresa con respecto a Sergio Massa. Creemos que la narrativa del mercado posterior a las primarias aún no se ha reflejado completamente en las valoraciones del mercado, y que a su debido tiempo se producirá una corrección a niveles más bajos", advierte Barclays.
El problema adicional es que la tasa a 10 años en Estados Unidos está acelerándose: cuando los operadores estimaban que iba a ubicarse en 3,8% en 2023, está cerrando el año acercándose al 5%". La caída de Wall Street arrastra a los emergentes y desde ya a los papeles argentinos, completando una tormenta perfecta para el mercado local.
"El plan de dolarización desfinanciada de Milei alimenta las expectativas de inflación. Sin una financiación significativa, el tipo de cambio oficial que permite la recompra de pesos es significativamente más bajo que los actuales niveles paralelos de tipos de cambio no oficiales. A medida que los agentes locales vean que se está gestando un shock inflacionario, se vuelve más probable que los bienes no estén en las góndolas y los precios internos suban. Esta dinámica del mercado de bienes probablemente se materializaría en anticipación del nacimiento del nuevo gobierno, lo que genera preocupaciones sobre la gobernabilidad. El servicio de la deuda probablemente dependerá del orden de magnitud de la perturbación, lo cual es difícil de predecir", consigna de una forma categórica Barclays.
Los bonos en pesos y el accionar del BCRA también conspiran contra la estabilidad de todas las cotizaciones. La corrida de los bonos en pesos la está combatiendo el BCRA con emisión de pesos y ayer habrían sido cerca de $200 mil millones los que utilizó la entidad que preside Miguel Pesce para sostener los precios. Puntualmente ayer el BCRA salió a comprar otros papeles, los que no licitaba el Tesoro aumentando su radio de protección, pero alentando la suba adicional del dólar en todas sus vertientes.
"Creemos que la capacidad de Massa para seguir manteniendo entera la economía a punto de despedazarse disminuirá si Milei gana las elecciones en la primera vuelta. De hecho, su trabajo probablemente se volvería extremadamente difícil debido a la dinámica inflacionaria del plan de dolarización no financiado y su falta de influencia para negociar con los actores locales", culmina Barclays.
La pérdida de reservas son otra amenaza. Sin los DEG que sirven para pagarle al FMI, están debajo de u$s 23.000 millones.
Todo colgando de un hilo.




