Este martes se conocerá el dato de inflación de septiembre. El mercado calcula que se verá un rebote respecto de agosto, aunque, aun así, señalan que el traslado a precios se mantiene limitado.
De cara a las elecciones de octubre, el mercado mantiene una postura conservadora sobre el posicionamiento en pesos. Cuáles son los títulos en moneda local que podrían resultarle atractivos a quienes tienen una expectativa más positiva y a quienes son menos optimistas respecto de la inflación.
Dato de inflación de septiembre
En la previa al dato de inflación que publicará el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) hay algunos indicios de que el mercado ve una suba en el nivel de precios registro inflacionario para septiembre respecto de agosto. Sin embargo, lo que queda en evidencia también es que el traslado de la volatilidad cambiaria al índice de precios al consumidor (IPC) se mantiene limitado.
En la antesala del dato que se conocerá mañana, se publicó la inflación en la Ciudad de Buenos Aires, que subió 2,2% mensual en septiembre, por encima del 1,6% de agosto.
Por su parte, inflación núcleo también aumentó 2,2% mensual en septiembre. Con este registro, alcanzó el 35% interanual.
Hacia el interior de los datos, los precios de los bienes subieron 2,3% m/m y los de los servicios 2,1% m/m.
Los analistas de Max Capital detallaron que es la primera vez en varios meses que los bienes superan a los servicios, lo que sugiere que el efecto cambiario está afectando a los transables y que esperan una inflación nacional cercana al registro de CABA.
"Al ajustar con los ponderadores del IPC nacional, este dato sugiere una inflación cercana al 2,2% mensual. Esperamos que el IPC nacional, que se publicará el próximo martes, se ubique en torno a ese nivel", dijeron.

Por otro lado, también se publicó esta semana el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) en el que los economistas ahora proyectan una inflación de 2,1% mensual en septiembre, levemente por encima del registro de agosto.
En concreto, la inflación esperada para los próximos meses subió 0.3 puntos en promedio. El consenso de la profesión es que no perforará el 2% hasta enero de 2026 y cerrará 2025 con una inflación anual de 30%.
"Si bien las expectativas para los próximos meses fueron revisadas al alza, el Gobierno aún parece lograr anclar las expectativas pese a la volatilidad, y las proyecciones continúan marcando una moderación gradual de la inflación: 2,0% m/m en octubre, 2,1% m/m en noviembre, 2,0% m/m en diciembre, 1,9% m/m en enero y 1,7% mensual en febrero. El piso del 2% mensual sigue siendo difícil de quebrar", dijeron desde Max Capital.

Finalmente, los break even de inflación también están anticipando una inflación en torno al 2,1% para septiembre. La expectativa inflacionaria en los break even de inflación, el mercado espera un 2,3% para septiembre y octubre, bajando a niveles de 1,9% mensual hasta abril de 2026.
Luego, desde mayo en adelante, la inflación esperada sería del 1,7% mensual promedio. El mercado espera que el dato de inflación de esta semana vaya en línea con el dato de CABA y de lo que proyecta el REM.
Los analistas de Grupo SBS indicaron que la inflación en CABA para septiembre mostró que, aun acelerando, se evidenció un bajo pass-through.
"A juzgar por distintos relevamientos privados, el bajo pass-through se repetiría en el dato de inflación minorista nacional de INDEC a conocerse el 14 de octubre", dijeron.

Inversiones en pesos
La expectativa del mercado sobre la inflación coincide también con los registros que están publicando las consultoras privadas.
Según las estimaciones de Equilibra, del IPC Nacional, en septiembre el IPC Nivel General subió 2,3% y el IPC Núcleo 2,1%. Los precios Estacionales lideraron el alza del mes (4,5%) y los Regulados treparon 1,8%.
Lo que queda en evidencia es que, a pesar de la volatilidad financiera y cambiaria, las expectativas inflacionarias se han mantenido bastante estables, e incluso a la baja.
De cualquier manera, la tensión cambiaria se ha mantenido a lo largo de la semana, haciendo que la dolarización de carteras se sostenga.
A once ruedas de las elecciones, el mercado sigue buscando cobertura y mantiene un posicionamiento defensivo, a la espera de definiciones concretas sobre el alcance del respaldo financiero y el rumbo político que surja de los comicios.
Mientras el dólar subía a lo largo de la semana, las tasas de interés en pesos se desplazaron al alza, conforme también el equipo económico retiraba pesos del mercado mientras vendía dólares y títulos dólar linked.

Bajo este escenario de incertidumbre, el mercado toma una postura conservadora con el posicionamiento en pesos.
Desde Cohen advirtieron que la demanda de cobertura siguió siendo elevada y obligó al Tesoro a intervenir por debajo del techo de la banda, mientras que el balance cambiario continuó mostrando un déficit de cuenta corriente de u$s 1133 millones en agosto, lo que evidencia el agotamiento de un esquema difícil de sostener en el tiempo.
Además, desde Cohen agregaron que esto se suma un contexto político más incierto, donde la posibilidad de un resultado electoral desfavorable limita las chances de acceso al financiamiento externo y restringe el ingreso de capitales.
Por ello, tomaron una postura conservadora con el posicionamiento en pesos.
"Bajo este escenario, dentro de las estrategias en pesos privilegiamos el posicionamiento en instrumentos dollar-linked de corto plazo. Resultan especialmente atractivos tras las intervenciones del BCRA vendiendo estos títulos en el mercado secundario, lo que los dejó relativamente baratos -con los tramos más cortos rindiendo un spread superior al 2%- en un contexto de fuerte demanda de cobertura cambiaria", detallaron.
En particular, destacaron el D31O5 (devaluación +80%), que descuenta una devaluación implícita de tan solo 0,4% hacia fines de octubre, y el TZVD5 (devaluación +3%), que descuenta una devaluación implícita del 11% hacia fin de año.
Finalmente, agregaron que para el resto del universo en pesos, siguen manteniéndonos cortos en duration y privilegiando los bonos CER frente a la tasa fija.
"Destacamos el TZXD5 (53,3% TIR), que descuenta una inflación implícita promedio del 1,2% m/m entre septiembre y octubre, un nivel que luce relativamente bajo en el contexto reciente de presiones cambiarias persistentes".

Por su parte, los analistas de Facimex Valores afirmaron que para el posicionamiento en pesos priorizan títulos del tramo corto y medio en la antesala del dato de inflación a ser publicado esta semana.
"Ante la suba de tasas en el margen, recomendamos mantener exposición en activos de baja o media duration. Asignamos un porcentaje de la cartera a la Lelink de octubre (D31O5), con un perfil de retornos asimétrico al alza. Vemos valor en el Bono Dual de Marzo (TTM26), que dejaría retornos muy atractivos según nuestro escenario base", dijeron.
Además, remarcaron que complementan la cartera con instrumentos a tasa fija cortos, aprovechando que los break-evens de inflación hasta mediados del año que viene están relativamente alineados con su escenario base.
"Destacamos al Boncap de febrero (T13F6) con una TEA del 81% y una TEM del 5,1%. Nos gustan tambien el Boncer con vencimiento en 2026, aprovechando que las tasas reales superan el 30%. En particular, destacamos al Boncer de junio de 2026 (TZX26) en CER+34% y de diciembre de 2026 (TZXD6) en CER+30%", dijeron.

Apuesta inflacionaria para todos los gustos
Cuando se analiza toda la curva CER también se puede que la misma ha sufrido al compararla contra otras fechas.
El tramo corto de la curva CER hoy opera en niveles de 50% a 55%, cuando a mitad de septiembre llegó a rendir por encima del 40%.
En el tramo medio y largo de la curva, los títulos operan con rendimientos de entre 28% y 30% de tasa real y el tramo largo de 15% a 25%.
Lo interesante detrás de la curva CER es que la misma puede ser un activo que pueda resultarle interesante tanto para el optimista como para el pesimista sobre el futuro macro e inflacionario en Argentina.

Los analistas de Grupo SBS indicaron que existe valor en la deuda CER, tanto para inversores optimistas como para los pesimistas.
Según explicó Juan Manuel Franco, los bonos CER lucen atractivos para aquellos con un view negativo sobre la nominalidad nominal de Argentina.
"Para los pesimistas, que posiblemente incorporen en su escenario una aceleración inflacionaria, ya sea por la necesaria reducción de la tasa real en pesos como por el impacto adicional de cierta suba del TCR o por el resultado electoral, la curva CER luce atractiva", dijo.
Por otro lado, también consideró que los inversores con un escenario constructivo pueden ver valor en CER.
"El entorno de tasas reales deberá necesariamente ser más bajo si se pretende dar cierto impulso a la actividad. Por ello, aún para optimistas, vemos valor en tener parte de la cartera de pesos en papeles CER, idealmente con vencimiento en el segundo semestre 2026 en adelante", detalló.
Desde Research Mariva detallaron que esperan que los títulos en pesos continúen con volatilidad antes de las elecciones del 26 de octubre, ya que el mercado ha entrado claramente en un contexto preelectoral.
En cuanto a las inversiones y para los inversores que buscan exposición a instrumentos en moneda local, desde Research Mariva resaltan que el extremo largo de la curva CER resulta particularmente atractivo.
"Suponiendo que la curva se normalice después de las elecciones a un rendimiento cercano al 11% (nivel en el que cotizaba a fines de junio), estimamos un potencial de alza del 27,6% para el bono CER TZXD7. Actualmente, el punto de equilibrio cambiario se ubica en torno a los $1973, lo cual consideramos elevado en un escenario de sólido desempeño electoral del partido gobernante", dijeron.




