La derrota de La Libertad Avanza (LLA) en la Provincia de Buenos Aires abre un nuevo capítulo para los mercados locales, con repercusiones inmediatas sobre el dólar, que presiona al alza, los bonos y los ADRs argentinos que se desploman.
Pero la semana trae otro test clave para el Gobierno: la licitación del Tesoro, que enfrentará vencimientos por $7,2 billones correspondientes a la Lecap S12S5, dentro de un total de $16,3 billones en septiembre, sin considerar las tenencias del BCRA. De acuerdo al cronograma oficial de la Secretaría de Finanzas, este lunes se anunciarán los instrumentos que se ofrecerán el miércoles.
La capacidad del mercado para absorber estas emisiones será clave para definir la presión sobre los rendimientos y la curva de deuda en pesos en un contexto en el que la derrota del Gobiernoeste domingo en las elecciones legislativas en la provincia de Buenos Aires para renovar 46 bancas en Diputados y 23 en el Senado, además de cargos municipales y consejeros escolares perjudicaron la imagen del oficialismo frente al mercado.
El resultado electoral
El peronismo, bajo el sello Fuerza Patria, logró una victoria contundente con alrededor del 47% de los votos y superó por más de 13 puntos a la coalición oficialista La Libertad Avanza (33%-34%). El triunfo fue amplio en la mayoría de las secciones -Primera, Tercera, Segunda, Cuarta, Séptima y Octava- mientras que LLA solo se impuso en la Quinta y Sexta.

Desde Cohen Aliados Financieros, opinaron que el resultado supone un revés significativo para el Gobierno de Javier Milei y proyecta a Axel Kicillof como principal referente opositor con miras a 2027.
"El impacto fue inmediato en los mercados: los bonos retrocedieron cerca de 10%, el tipo de cambio trepó 6% hasta los $1.450 y las acciones argentinas se hundieron alrededor de 20% en la apertura, reflejo de la mayor percepción de riesgo político y la incertidumbre sobre el rumbo económico".
Pablo Repetto, jefe de Research de Aurum Valores, adelantó a El Cronista que, es probable que el Tesoro apueste por una oferta diversificada de instrumentos: "Letras de corto plazo, bonos dólar linked para reducir la necesidad de intervenir en el mercado de futuros, y títulos ajustables tanto por tasa fija (TAMAR) como por CER".
La licitación, clave
Repetto señaló que la Secretaría de Finanzas podría complementar la estrategia con una flexibilización de encajes, al permitir que las entidades los integren con estos títulos a plazos específicos, con el fin de elevar la tasa de adhesión a la licitación.
Desde Portfolio Personal de Inversiones (PPI) agregaron que en algunos ámbitos circula la idea de que las autoridades "podrían comenzar a rescatar bonos en pesos para apuntalar la curva, aunque en el contexto actual de caída en la demanda real de dinero esa estrategia luce contraproducente". La única forma de sostenerla, señalan, "sería obligar al sistema bancario a incrementar su posición en títulos públicos".
Para el broker, en línea con Repetto, el BCRA podría aprovechar el anuncio de la próxima licitación del miércoles para elevar los encajes y ajustar la porción integrable con títulos públicos. "Dado que el apetito de los agentes privados no financieros por instrumentos en pesos tiende a desvanecerse, el ratio de rollover luce cada vez más tensionado, lo que exigiría un aumento mayor en los requerimientos de encaje", advirtió.
Y es que el Tesoro enfrenta pagos por $17 billones, de los cuales unos $6,4 billones están en manos privadas. "Bajo este escenario, nuestra estimación apunta a un incremento de unos 5 puntos en el encaje total sobre depósitos para absorber la liquidez disponible. Sin embargo, cualquier decisión que implique endurecer el marco monetario podría complicar aún más el panorama electoral de medio término. A esta altura, es probable que se opte por mantener la "nominalidad" lo más estable posible, aun a costa de seguir frenando la actividad económica", concluyó PPI.
Desde Wise Capital compartieron que, se espera que el impacto político de las elecciones influya en las condiciones de colocación de esta nueva licitación, especialmente en las tasas de interés "que exigirán los bancos para renovar sus posiciones". Sucede que la incertidumbre electoral ya había generado tensiones previas en el mercado de deuda en pesos, pero la derrota oficialista profundiza el clima de cautela.
"Desde que el Gobierno eliminó las LEFI las tasas pagadas por el Tesoro en las Lecaps más cortas pasaron del 29% al 55% nominal anual. Para extender la absorción de pesos, el Ejecutivo debió flexibilizar los encajes bancarios y permitir el uso de letras con vencimientos mayores a 60 días, conocidas como TAMAR, que ajustan por la tasa mayorista de los plazos fijos", agregaron desde Wise. En la última licitación, el Tesoro convalidó una tasa efectiva anual del 86% en estos instrumentos.
Aunque se trata de una tasa variable, el dato funciona como termómetro del apetito y "el nivel de desconfianza" que atraviesa al sistema financiero.
Una prueba de caracter
Adrián Yarde Buller, estratega jefe de Facimex Valores, explicó en declaraciones a este medio que, esta semana vencen $17,1 billones, pero según sus estimaciones, "solamente $5,9 billones están en poder de tenedores privados".
Para el estratega, "es probable que el equipo económico siga inclinándose por instrumentos relativamente cortos y tal vez aparezca un menú con mayor presencia de alternativas dollar linked".
El analista financiero, Pablo Das Neves, comentó a este medio que, el gobierno va a enfrentar en los próximos días "una prueba de carácter".
"El mercado va a ir a buscar el techo de la banda y en $1450 aparecen los dólares de intervención. Si el gobierno resiste va a ganar credibilidad, pero tiene poco poder de fuego como para aguantar hasta las generales", deslizó Das Neves.
Para el experto, ahí cobra relevancia la licitación del miércoles: "Si el Gobierno sigue con las tasas altas o aplica otra política como aumentar más los encajes, significa que el mercado tendrá mucha presión", concluyó.



