

Si bien estas últimas semanas mucho se ha hablado acerca de Dani Alves, preso en Barcelona tras ser denunciado por abuso sexual, su estrategia judicial y su situación como detenido, poco se había mencionado sobre el estado de la denunciante.
En las últimas horas, la abogada de la mujer, Ester García López, contó la complicada situación que está atravesando la joven. "Tiene muchas dificultades para poder dormir", ha declarado.
La presunta víctima de Dani Alves contó cómo vive desde que denunció al futbolista

De acuerdo con la letrada, para poder procesar todo lo sucedido aquella noche con el futbolista brasileño, la joven permanece bajo un tratamiento psicológico a través de una entidad pública especializada en víctimas de violencia.
"Tiene muchas dificultades para poder dormir, los profesionales le prescribieron un tratamiento farmacológico con ansiolíticos", ha expresado García López.
Según ha indicado el diario El Periódico de Catalunya, las pruebas de ADN habrían confirmado que los restos de semen hallados en el cuerpo de la mujer presuntamente violada por Dani Alves son, efectivamente, del exfutbolista del Barcelona.
LA DENUNCIA CONTRA Dani Alves por ABUSO SEXUAL
El hecho por el que Alves fue denunciado habría sucedido la noche del 30 al 31 de diciembre pasado. El futbolista, de 39 años, fue detenido por los Mossos d'Esquadra por una presunta agresión sexual.

Alves llegó a España procedente de México, lugar donde reside actualmente. Allí jugaba en Pumas, club para el que fichó antes del Mundial, pero que le rescindió en las últimas semanas el contrato que lo vinculaba hasta junio de este año.
Todo habría ocurrido en la discoteca Sutton. La presunta víctima y denunciante es una joven de 23 años, que aseguró haber sido abusada por el futbolista en uno de los baños del local.
De acuerdo con lo trascendido, la noche en la que ocurrieron los hechos, la joven, de 23 años, quedó sumida en una crisis de llanto y ansiedad. Cuando se disponía a salir de la discoteca junto a sus amigas, el personal de seguridad del lugar, que se encuentra en la calle deTuset, detectó que algo sucedía.
Rápidamente, tras llevarla a una oficina y conversar con la víctima, los responsables de la sala activaron el "protocolo contra las violencias sexuales" y llamaron a los Mossos d'Esquadra. A la joven se la condujo, luego de hacer la denuncia, al Hospital Clínic para ser examinada. Fue entonces cuando los agentes abrieron la investigación.
Tras la última modificación legislativa por la Ley solo sí es sí, las penas oscilan entre los cuatro y los 12 años de prisión cuando la agresión consista en acceso carnal.


