

- Guía completa sobre el funcionamiento del alquiler con opción a compra
- Merece la pena el alquiler con opción a compra para el inquilino
- ¿Cuánto puedo llegar a ahorrar con esta modalidad?
- Qué debe incluir el contrato de alquiler con opción a compra
- Aspectos a tener en cuenta antes de aceptar un alquiler con opción a compra
Si estás pensando en comprar una vivienda a medio plazo, el alquiler con opción a compra puede ser una opción interesante. Esta modalidad te permite alquilar la propiedad con la posibilidad de comprarla en el futuro. Es importante tener en cuenta tanto si eres propietario como inquilino o comprador.
Esta alternativa para aquellos que desean adquirir una propiedad, pero no tienen los recursos necesarios en el momento. Al alquilar, se establece un contrato que permite al inquilino comprarla en un plazo determinado. Esto brinda la oportunidad de vivir en la casa antes de tomar la decisión final.
Sin embargo, ambas partes deben tener en cuenta diversos aspectos legales y financieros al optar por esta modalidad. Es importante establecer claramente las condiciones de la opción de compra, como el precio de venta y el plazo para ejercerla. Además, es fundamental contar con asesoramiento profesional para garantizar que todos los aspectos legales estén cubiertos.

Guía completa sobre el funcionamiento del alquiler con opción a compra
El alquiler con opción a compra permite al inquilino vivir en la vivienda y pagar cuotas mensuales como en un alquiler normal. Después de un tiempo acordado, puede decidir si compra la propiedad o no. En este tipo de contrato, se incluye un subcontrato de alquiler y otro de compraventa, explicó el portal Habitaclia.
El inquilino puede vivir en el inmueble por un tiempo determinado y luego tiene derecho a comprarlo, descontando las cuotas del alquiler. Durante el periodo de alquiler, el contrato se rige por la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), mientras que la compraventa se regula por el Código Civil.
Merece la pena el alquiler con opción a compra para el inquilino
El alquiler con opción a compra es una alternativa atractiva para aquellos que se encuentran en una situación financiera precaria y no pueden acceder a una hipoteca. También es una opción para aquellos que aún no están seguros de su futuro laboral y desean probar la vivienda antes de comprometerse a comprarla.

Las ventajas del alquiler con opción a compra incluyen el ahorro de dinero, ya que parte del alquiler se descuenta si finalmente se decide comprar la vivienda. Además, este tipo de contrato facilita la concesión de una hipoteca, ya que demuestra que el solicitante ha pagado una parte de la vivienda. También es posible acceder a ayudas al alquiler por parte de las Administraciones Públicas.
¿Cuánto puedo llegar a ahorrar con esta modalidad?
Primero, es necesario saber que el ahorro no es monetario, sino un respiro hasta que se deba abonar la cantidad pactada por el piso. Sin embargo, se destaca que sí hay un ahorro que se puede contabilizar, que es el de la hipoteca. Al haber reducido el precio de compra mediante el alquiler con opción a compra, la hipoteca costará menos.
Por ejemplo, si la vivienda cuesta 100.000 euros y el inquilino está 5 años con un alquiler con opción a compra, pagando una renta mensual de 833 euros. Al cabo de 5 años, ha pagado 50.000 euros y le quedan 50.000 euros por abonar. Esto le permite solicitar una hipoteca con una duración 5 años menor que si la hubiera contratado al inicio.

Qué debe incluir el contrato de alquiler con opción a compra
Al ser un contrato doble, es conveniente especificar todas las condiciones tanto del contrato de alquiler como del contrato de compraventa para evitar problemas posteriores. En el contrato de alquiler se deben incluir datos como la duración del arrendamiento, el plazo para ejercer el derecho a la compra y los gastos asociados. En el contrato de compraventa se debe especificar la voluntad del propietario de vender al inquilino, el precio de venta y los descuentos o pagos iniciales.
Aspectos a tener en cuenta antes de aceptar un alquiler con opción a compra
Además de estos puntos, hay una serie de consideraciones que ambas partes deben tener en cuenta a la hora de elaborar un contrato de alquiler con opción a compra. En este sentido, el inquilino o comprador tiene que ser consciente de que tiene derecho a permanecer en la vivienda mientras dure el contrato de alquiler.
Aunque se decida no ejercer el derecho a la compra, el inquilino puede permanecer arrendado mientras tenga vigencia el contrato. También puede prorrogar el contrato de alquiler, pero para ello es imprescindible que el propietario esté de acuerdo. Si se realiza esta acción, la opción de compra también deberá especificarse en la prórroga porque si no quedaría invalidada. Además, el inquilino tiene exclusividad para la compra de la vivienda, siempre y cuando se respete el plazo establecido en el contrato.
No hace falta esperar al final del contrato para ejercer el derecho a compra, se puede realizar antes y, de hecho, es beneficioso para ambas partes. Sin embargo, si se producen dos retrasos en el pago del alquiler, se pierde la opción a compra y también se pierde la prima aportada. Por último, es importante cumplir con las obligaciones fiscales, ya que mientras solo se indique el precio de la vivienda y el plazo para ejercer el derecho a compra, el inquilino podrá deducirse el coste del alquiler.






