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Con el capítulo fiscal, el ministro de Economía, Luis Caputo, adelantó recaudación que le permitió agrandar el superávit fiscal en 2024, pero las consecuencias de esa jugada comenzaron a sentirse en los ingresos de este año.

Por medio del informe de gestión que presentó ayer el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, en la Cámara de Diputados, se conoció el detalle de los ingresos que generó el Régimen Especial de ingreso del Impuesto sobre los Bienes Personales (REIBP).

La propuesta que se aprobó en la Ley 27.743 hacía que los contribuyentes adelanten el pago del impuesto sobre los Bienes Personales por cinco años (2023-2027, inclusive) sobre el patrimonio al 31 de diciembre de 2023, inclusive con una alícuota de 0,45% o de 0,50% en caso de haber blanqueado.

Según el informe de gestión, el año pasado ingresó $ 1.139.898 millones por el REIBP. En agosto, la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) computo $ 67.529 millones; en septiembre, $ 881.183 millones; en octubre, $ 137.708 millones; noviembre, $ 36.725 millones; y en diciembre $ 16.754 millones.

Un adelanto de ingresos que se coparticipó y que a la par de los cambios en el impuesto a las Ganancias en personas físicas más el salto extraordinario que tuvieron las de empresas producto de la devaluación de fines de diciembre ayudaron -en parte- a las arcas de las provincias.

Pero las consecuencias de esa jugada comienzan a verse ahora. En lo que va del año, los ingresos por REIBP apenas totalizaron $ 3.368 millones: en enero, ARCA recaudó $ 702 millones; en febrero, $ 922 millones; marzo, $ 281 millones; abril, $ 353 millones; mayo, $ 851 millones; junio, $ 57 millones; y julio, $ 316 millones.

Gráfico extraído del informe del Instituto Argentino de Analisis Fiscal (IARAF).
Gráfico extraído del informe del Instituto Argentino de Analisis Fiscal (IARAF).

A pesar de ello, según el Instituto Argentino de Analisis Fiscal (IARAF) en 2024 las transferencias automáticas totales alcanzaron los $ 42.133.000millones, lo que implicó una caída real interanual del 10%. Mientras que la coparticipación neta terminó el año con una baja real del 8,8%, debido a la baja interanual real del 9% de la sumatoria de Impuesto al Valor Agregado (IVA) y Ganancias (estos dos tributos explican el 94% de la masa coparticipable neta).

¿Exclusiones?

En las últimas semanas, los tributaristas encendieron alertas sobre las exclusiones que empezó a realizar el fisco nacional a quienes realizaron el pago adelantado del impuesto. Ante ello, El Cronista realizó un pedido de información pública para que detallen la cantidad sobre el que no tuvo respuesta.

"Esta Agencia no cuenta con la información procesada y su producción demandaría de esfuerzos para la recopilación, procesamiento y exposición de los datos requeridos. La imposibilidad de brindar la información responde al alto costo que implicaría la puesta a disposición de los recursos tantos tecnológicos como humanos para la extracción de la misma", afirmaron.

Pero la situación se agrava por el vacío legal que exponen los tributaristas. "No hay nada reglamentado por ARCA respecto a esto. Se supone que el beneficio no debería caer porque la Ley no dice nada sobre eso", comentó el contador Marcos Felice.

El modus operandi del organismo recaudador sería abrir inspecciones a los contribuyentes por bienes que no se consideraron en el REIBP y con ello, pretenden excluirlo a pesar de que no haya ninguna norma legal que avale esa postura.

"A lo sumo el fisco nacional tendrían que ajustar lo que pagaste por los cinco años, sumando lo que corresponde por los bienes que no fueron incluidos en la declaración jurada original", destacó Felice en conversación con este medio.

Ante la consulta a fuentes oficiales de ARCA sobre si se publicará una Resolución General en el Boletín Oficial respecto a que sucederá con los contribuyentes a los que se los excluya del régimen especial no existió una respuesta al cierre de esta nota.

La contadora Elisabet Piacentini tambiéncomentó que ARCA está reclamando a algunos contribuyentes por errores en el cálculo a pagar. "Había que abonar un pago a cuenta y si uno se equivocaba en la liquidación -que teníamos que hacer los contadores con un Excel- debía abonarse con una penalidad muy importante", marcó.