

El Papa Francisco se destacó por dedicar sus oraciones en búsqueda de la paz mundial. Fue un fuerte opositor de los conflictos internacionales y múltiples veces realizó llamados de reconciliación y unidad. "Se puede hablar de una tercera guerra combatida 'por partes'", fue una de sus declaraciones más resonantes y que comienza a hacerse realidad.
La creciente de las tensiones geopolíticas por los conflictos en medio oriente y la posible intervención de potencias como China y Estados Unidos, marcan la agenda internacional. Muchos ejércitos reforzaron sus prácticas militares y la idea de una Tercera Guerra Mundial está más cerca que nunca.
Llega la Tercera Guerra Mundial: la profecía del Papa Francisco que se está haciendo realidad
El Papa Francisco fue uno de los principales promulgadores de la paz y el cese al fuego de los conflictos internacionales. Se avocó, específicamente, a promover la ayuda humanitaria a los niños y adultos, quienes tienden a ser los más perjudicados en dichas situaciones.
Durante la ceremonia por el centenario de la Primera Guerra Mundial en 2014, la cual se llevó a cabo en un cementerio italiano de guerra, Francisco se pronunció acerca de las escaladas bélicas y había expresado que "Hoy, tras el segundo fracaso de una guerra mundial, quizás se puede hablar de una tercera guerra combatida 'por partes', con crímenes, masacres, destrucciones".

Si bien el discurso lo realizó 11 años atrás, el difunto líder de la Iglesia Católica hacía referencia a las tensiones políticas en Gaza que explotaron en los últimos años tras las diferencias con Israel.
"La guerra es una locura", expresó el argentino al tiempo que catalogó a las guerras como batallas motivadas por la "avaricia, la intolerancia y la ambición".
¿Por qué podría aproximarse una Tercera Guerra Mundial?
El concepto de una Tercera Guerra Mundial cobra fuerza por la combinación de varios focos de tensión en simultáneo. Además del estrecho de Taiwán, donde Estados Unidos y China mantienen una rivalidad estratégica, persisten la guerra en Ucrania con la participación de Rusia, la escalada de violencia en Medio Oriente y el avance de alianzas militares entre potencias nucleares.

A esto se suman pruebas de armamento de última generación y la modernización de arsenales, lo que alimenta la percepción de una nueva carrera armamentista. Aunque los expertos consideran que una guerra global aún es poco probable, la multiplicación de conflictos y la fragilidad de los mecanismos internacionales de diálogo refuerzan el temor a una escalada de alcance mundial.




