Bodegas del Desierto, empresa que pertenece al grupo Albanesi -uno de los principales generadores privados de electricidad del país-, despidió a un tercio de su plantel debido al contexto actual que enfrenta el sector vitivinícola por la caída del consumo, las pérdidas por heladas y el exceso de stock. La compañía señaló que necesita “hacer una pausa para reordenar la situación” a la espera de un contexto más favorable. Aclaró que eso, no obstante, no interrumpirá la producción de la bodega.
Según informó la compañía en un comunicado, la decisión de desvincular a 12 de sus 45 empleados se tomó “a pesar de los esfuerzos realizados” y responde a un deterioro que atraviesa toda la actividad, con precios congelados en el mercado de graneles, costos que siguen en aumento y ventas internas y externas que no logran recuperarse. A esto se suma un volumen de vino almacenado que, a octubre de 2025, llegó a 1300 millones de litros, mientras que el mercado local solo vendió 73 millones.
El principal accionista de Bodegas del Desierto es el grupo Albanesi, que este año enfrentó el default de Generación Mediterránea (Gemsa), el holding que nuclea a sus 10 centrales eléctricas del grupo.
Esta semana anticipó que había llegado a un preacuerdo con los acreedores que tienen u$s 930 millones en deuda de la empresa, cuyo pasivo total es de u$s 1477 millones y ya hay u$s 438,2 millones reestructurados. Se espera que la semana próxima haya más novedades.
El caso de Norton
El antecedente más reciente de crisis en la industria vitivinícola es el caso de Norton, que se presentó en concurso preventivo al no poder hacer frente a su situación financiera. La bodega comunicó en su momento que la medida buscaba asegurar la continuidad de sus operaciones y preservar los puestos de trabajo en un contexto que definió como desafiante para la industria. Según datos del Banco Central, la bodega registra hoy 287 cheques rechazados por más de $ 3813 millones y una deuda que supera los $ 1100 millones. En su momento aparecía en situación 1, la categoría más benigna del sistema, pero actualmente figura en situación 4 con varias entidades, un escalón previo al nivel 5, donde los créditos pasan a considerarse irrecuperables.
En julio, la firma había designado a Tomás Lange como nuevo CEO en reemplazo de Rafael García, que había asumido en 2023 tras la salida de Michael Halstrick, histórico representante de la familia Swarovski en el país. Ese cambio se dio en medio de un esquema de pagos cada vez más ajustado y de mayores dificultades para sostener la operatoria cotidiana.
La industria vitivinícola argentina enfrenta su peor escenario en más de una década. Según el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), el consumo interno cayó 17% interanual en agosto, con un despacho de 678.265 hectolitros, uno de los niveles más bajos desde 2015.
En paralelo, las exportaciones crecieron 13,4% en septiembre, luego de dos meses de caídas consecutivas. El organismo señala que la demanda también está impactada por cambios profundos en los hábitos de consumo, con nuevas generaciones que beben menos alcohol y de manera más selectiva.



