

El accidente cerebrovascular (ACV), también conocido como derrame cerebral, se encuentra entre las principales causas de discapacidad y muerte a nivel global.
En la mayoría de los casos, esta afección se manifiesta de manera repentina, lo que subraya la importancia de aprender a identificar los primeros síntomas
ACV: un síntoma común, aunque subestimado
Según expertos en neurología, hay un síntoma temprano de ACV que muchos experimentan, pero pocos relacionan con esta condición: la pérdida repentina del equilibrio o la coordinación motora.
La Asociación Americana del Corazón (AHA) y la Asociación Americana del Ictus (ASA) destacan que este signo, aunque menos conocido que la parálisis facial o la dificultad para hablar, es clave para un diagnóstico temprano.
Signos distintivos del derrame cerebral que no debes ignorar
Además de la pérdida de equilibrio, los neurólogos destacan otros signos característicos de un derrame cerebral. Entre los más comunes se encuentran:
- Entumecimiento o debilidad repentina en la cara, brazo o pierna, especialmente en un lado del cuerpo.
- Dificultad para hablar o entender lo que se dice, incluso en situaciones familiares.
- Pérdida de visión en uno o en ambos ojos.
- Dolor de cabeza repentino, intenso y sin causa aparente.

Estas señales forman parte del protocolo FAST, un acrónimo en inglés que invita a observar el rostro (Face), los brazos (Arms), el habla (Speech) y, sobre todo, actuar con rapidez (Time). Si se nota alguna anomalía en estos tres primeros aspectos, el tiempo de reacción es vital para evitar daños permanentes.
¿Cómo prevenir un accidente cerebrovascular y reducir su riesgo?
Un ACV ocurre cuando se detiene el flujo sanguíneo al cerebro, lo que impide que las neuronas reciban oxígeno y nutrientes. Existen dos tipos principales:
ACV isquémico, que representa el 85% de los casos y se produce por una obstrucción arterial.
ACV hemorrágico, menos común pero más letal, causado por la ruptura de un vaso sanguíneo.
Entre los factores de riesgo más importantes se encuentran:
Hipertensión arterial
Diabetes
Colesterol alto
Tabaquismo
Inactividad física
Obesidad
Estrés crónico
El envejecimiento también incrementa las probabilidades de sufrirlo, pero se reportan más casos en adultos jóvenes. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año más de 15 millones de personas sufren un ACV y al menos 5 millones de ellas quedan con discapacidades permanentes.
Prevención del ACV: Estilo de vida saludable y chequeos médicos
La prevención del accidente cerebrovascular es crucial y los expertos indican que mantener un estilo de vida saludable puede reducir notablemente el riesgo. Esto incluye una dieta equilibrada, ejercicio regular y el control de condiciones como la hipertensión y la diabetes.
Además, se comprobó que la educación sobre los síntomas del ACV y la importancia de buscar atención médica inmediata puede salvar vidas. Las campañas de concientización son esenciales para empoderar a las personas a reconocer los signos y actuar rápidamente ante un posible derrame cerebral.
Importancia de la detección temprana en accidentes cerebrovasculares
El accidente cerebrovascular puede afectar a personas de todas las edades, incluyendo a jóvenes y adultos. La detección temprana de los síntomas es crucial, ya que cada minuto perdido puede aumentar el riesgo de daño cerebral irreversible.


