

El uso de estufasdurante el invierno es una necesidad para muchas familias. Sin embargo, cuando no se toman las precauciones adecuadas, estos aparatos pueden convertirse en un riesgo mortal.
Esta semana, una tragedia en el barrio porteño de Villa Devoto volvió a poner el foco sobre la seguridad en el uso de calefactores: cinco personas, incluida una niña de cuatro años, murieron por intoxicación con monóxido de carbono mientras dormían. Solo un bebé de tres años logró sobrevivir y fue hospitalizado de urgencia.
El hecho encendió la alarma sobre el uso correcto de estufas en los hogares argentinos y la importancia de revisar su funcionamiento antes de encenderlas.
Estufas: ¿cómo saber si son seguras?
No todas las estufas son iguales ni aptas para todos los espacios. A la hora de instalar un calefactor, hay que tener en cuenta varios factores que determinan si su uso es seguro:
Tiro balanceado o libre: las estufas con tiro balanceado son las más recomendadas, ya que expulsan los gases al exterior. Las de tiro natural o sin ventilación pueden ser peligrosas en espacios cerrados.
Ubicación del artefacto: nunca se deben colocar estufas a gas en baños ni en dormitorios si no están específicamente habilitadas para esos ambientes.
Certificación oficial: es clave verificar que el producto tenga el sello de seguridad de la Secretaría de Energía.

Instalación profesional: las estufas deben ser colocadas por gasistas matriculados. Las conexiones caseras con mangueras son extremadamente riesgosas.
Monóxido de carbono: el riesgo invisible
Una estufa mal instalada o en mal estado puede emitir monóxido de carbono, un gas tóxico que no tiene olor ni color, y que puede provocar la muerte en cuestión de minutos.
La intoxicación comienza con síntomas como somnolencia, mareos o náuseas, y muchas veces es confundida con malestar común, lo que retrasa la atención médica.
Por eso, el mantenimiento anual de las estufas es fundamental: un quemador desregulado o una salida obstruida pueden ser suficientes para que el gas se acumule sin que los ocupantes del lugar lo noten.
¿Cómo prevenir accidentes con estufas?
La forma más efectiva de evitar tragedias como la de Villa Devoto es adoptar medidas de prevención básicas pero esenciales:
Revisar las estufas todos los años, antes del invierno.
Ventilar los ambientes diariamente, incluso con frío.
No usar estufas sin salida al exterior en dormitorios.
Instalar detectores de monóxido de carbono en el hogar.
No dejar estufas encendidas por la noche o cuando no hay personas despiertas.
¿Qué tipo de estufas conviene elegir?
Para ambientes cerrados o donde se duerme, las estufas de tiro balanceado son la mejor opción. También existen estufas eléctricas como alternativa segura, especialmente si el lugar no cuenta con buena ventilación.


