

Desde el lunes 17 de noviembre rige un aumento del 9,7% en las tarifas de las líneas nacionales de colectivo que cruzan la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y el conurbano bonaerense. Con esta suba, el pasaje mínimo se ubicará cerca de los $ 500.
El ajuste alcanza principalmente a los servicios bajo jurisdicción nacional que circulan por el AMBA y se enmarca en el recorte de subsidios al transporte, con el objetivo de acercar el valor del boleto al costo real del servicio.
Nuevo aumento: cómo quedan las tarifas
El nuevo esquema tarifario queda establecido de la siguiente manera:
- 0 a 3 km: de $ 451,01 a $ 494,75.
- 3 a 6 km: de $ 502,43 a $ 551,16.
- 6 a 12 km: de $ 541,13 a $ 593,61.
- 12 a 27 km: pasará a $ 636,11.

El incremento se aplica sobre una tarifa base que permanecía congelada desde julio y constituye una de las subas más importantes del año para el transporte automotor en la región.
Cuáles son los servicios involucrados
La medida impacta en más de 100 líneas nacionales que conectan la Ciudad de Buenos Aires con el primer cordón del conurbano. Entre ellas figuran las líneas 1, 2, 8, 9, 10, 15, 17, 19, 20, 21, 22 y 24, entre otras.
Para los pasajeros que realizan trayectos cortos, el incremento implica un alza promedio de $ 44 en el boleto más económico, lo que afecta directamente a quienes dependen del transporte público como único medio de movilidad.
Por su parte, desde la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA) advirtieron que, pese al ajuste, las tarifas aún no alcanzan a cubrir los costos reales del sistema. Además, señalaron que los subsidios se redujeron drásticamente respecto de los niveles de años anteriores.

Además, se remarcó que la tarjeta SUBE registrada continúa siendo obligatoria para acceder a la tarifa de tramo mínimo, y quienes realicen recorridos más extensos verán incrementos proporcionales mayores.




