El mercado de bonos no pudo escapar el lunes a otra jornada de incertidumbre en la plaza local, con el centro de atención puesto en el dólar en sus diferentes versiones. Pero hay conexión inmediata con los títulos públicos dado que el gobierno los utiliza para las intervenciones en la Bolsa y así intentar contener el alza del dólar MEP y el "contado con liqui".

En cartera, el Ministerio de Economía cuenta con títulos públicos por u$s 30 mil millones de valor nominal, lo que se reduce a menos de u$s 7.000 millones valuados a precio de mercado. Cerca del 95% de esta tenencia son papeles de legislación argentina, principalmente el AL30. En tanto, existirían solamente bonos globales con legislación Nueva York por u$s 1.500 millones de valor nominal en poder de organismos oficiales.

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Por este motivo las intervenciones del gobierno en las operaciones del dólar en la Bolsa se realizan con ventas de AL30. No es casualidad entonces que este papel haya operado en franco retroceso ayer con caída del 4,5% a u$s 20,50. Ese retroceso fue de "sólo" 0,75% en el GD30 que clausuró la jornada en torno a los u$s 25,40.

Un elemento a destacar es lo que se conoce como la brecha de legislaciones, es decir la cotización del GD (legislación NY) versus la del AL30 (legislación argentina). A los valores de ayer, ese cociente llegó a un 23%, elevado nivel que es efecto colateral de las ventas oficiales del AL30 para contener el alza del "contado con liqui" y el dólar MEP.

Refleja también lo precario que son los papeles con legislación doméstica, con menor resguardo ante eventuales restructuraciones de la deuda que sus mellizos, los GD30 con legislación Nueva York para la resolución de incumplimientos en las condiciones de emisión.

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En todo lo que se refiere a la renta fija las miradas se centran en la licitación de deuda que hará hoy el Tesoro Nacional, por un monto cercano al billón de pesos. Si bien el tamaño de los vencimientos genera luces amarillas, muchos de los tenedores como bancos y compañías de seguros no tienen otra alternativa para las renovaciones por las regulaciones a las que son sometidos.

Del otro lado, pueden aún realizarse colocaciones a tres meses de plazo y caer el vencimiento antes de las PASO. Los ajustes bajo la inflación o la evolución del dólar link son las preferencias de los que participan en esta licitación. El Ministerio de Economía fruto de la alta inflación y las dudas a futuro de la economía viene sistemáticamente convalidando un alto costo financiero para las renovaciones, que supera el 130% efectivo anual.

Las paridades en torno al 20% comienzan a generar preguntas entre operadores sobre la conveniencia de apostar a estos papeles a la luz de la llegada de un posible gobierno pro mercado en diciembre, tras las elecciones. El único freno es el tiempo: diciembre es muy largo plazo en Argentina