

El Impuesto de Sucesiones y Donaciones es uno de los tributos que más controversia genera en España. Se trata de un gravamen que los herederos deben abonar tras recibir una herencia o una donación, aunque su aplicación y cuantía varía según la comunidad autónoma.
Sin embargo, este panorama está cambiando rápidamente. En 2025, varias regiones han decidido suprimir o bonificar casi por completo este impuesto, lo que implica que miles de personas dejarán de pagarlo. Esta decisión, impulsada en muchos casos por gobiernos autonómicos, busca aliviar la carga fiscal de familias y pymes.
Síguenos y léenos en Google Discover.
Léenos siempre en Google Discover.
Qué es el Impuesto de Sucesiones y quién debe pagarlo
Según explica el portal oficial del BBVA, el Impuesto de Sucesiones y Donaciones grava el incremento de patrimonio que experimenta una persona al recibir una herencia o donación. Es un tributo directo, personal y subjetivo, gestionado por las comunidades autónomas, por lo que no existe una tarifa única para todo el país.

El impuesto tiene en cuenta varios factores:
Valor de los bienes heredados.
Parentesco con el fallecido o donante.
Comunidad autónoma de residencia.
En general, los familiares directos (hijos, padres, cónyuges) disfrutan de mayores reducciones y bonificaciones que otros beneficiarios. Pero en muchas comunidades ya no pagan nada.
Cuáles son las comunidades autónomas donde ya no se paga el impuesto
A día de hoy, varias autonomías han aprobado la bonificación del 99% o la eliminación total del impuesto:
Andalucía: eliminación práctica para herencias entre familiares directos.
Comunidad de Madrid: bonificación del 99% tanto en sucesiones como en donaciones entre familiares cercanos.
Región de Murcia: bonificación del 99% en ambos casos.
Castilla y León: desde 2023 no se paga entre padres, hijos y cónyuges.
Galicia: amplias reducciones y exenciones.
Extremadura: suprime el impuesto desde 2025 para herederos de grupos I y II (hijos, padres, nietos, cónyuges).
Cantabria y La Rioja también han introducido fuertes reducciones.
Este tipo de medidas están orientadas a fomentar el arraigo familiar y evitar la fuga de patrimonios a otras regiones.
Dónde se sigue pagando y cómo saber si aplica
En otras comunidades, como Cataluña, Comunidad Valenciana o Asturias, el impuesto sigue vigente y puede alcanzar porcentajes elevados si no se aplican reducciones o si la herencia supera ciertos umbrales.
Para saber si se debe pagar o no, es recomendable:
Consultar el portal de la agencia tributaria autonómica
Revisar el grado de parentesco y el valor de la herencia
Asesorarse con un notario o gestor especializado
Según el Consejo General del Notariado, muchas de las operaciones de herencia se resuelven sin pagar grandes cantidades gracias a bonificaciones aplicables, aunque la clave está en conocer las normas locales.

Un cambio que impacta en miles de familias
La supresión del Impuesto de Sucesiones y Donaciones representa un alivio fiscal importante para muchas familias españolas. Permite conservar el patrimonio familiar sin penalizaciones adicionales, especialmente en momentos delicados como la pérdida de un ser querido.
Además, reduce la desigualdad territorial entre comunidades y evita situaciones de "turismo fiscal" dentro del propio país. Muchos expertos coinciden en que se trata de una tendencia que podría extenderse a otras regiones en los próximos años.
La decisión de cada comunidad dependerá de su política fiscal, pero todo apunta a que el futuro del impuesto está cada vez más limitado.




