

La pasta fresca casera siempre ha sido sinónimo de sabor, tradición y dedicación en la cocina. Ahora ese ritual puede simplificarse significativamente dejando que un electrodoméstico haga el trabajo. Una opción asequible permite preparar este plato en casa con total facilidad.
Ese aliado llega de la mano de Máquina para pasta 220 W de la marca Silvercrest, comercializada por Lidl. Este aparato eléctrico ofrece la posibilidad de elaborar distintos tipos de pasta fresca en minutos por tan solo 67,99 euros gracias a su precio reducido durante promociones recientes.

Cómo transforma esta máquina la cena italiana en casa
La máquina trabaja con una potencia de 220 W, suficiente para amasar y dar forma a la pasta sin esfuerzo. Cuenta con ocho discos intercambiables que permiten crear desde espaguetis o tallarines hasta formas más elaboradas como penne rigate o espirales. También incluye un accesorio para preparar raviolis.
El funcionamiento es sencillo: basta añadir harina, agua (y otros ingredientes si se desea), seleccionar el disco adecuado y pulsar el botón. En pocos minutos aparece la pasta fresca lista para cocer. Según la marca, se puede elaborar hasta 600 gramos de pasta por ciclo, ideal para una cena para varias personas.
Además, incluye vasos medidores, espátula, accesorio de limpieza y un libro de recetas, lo que lo convierte en una solución completa para quienes se inicien en la elaboración de pasta casera.
Por qué vale la pena frente a comprar pasta comercial
Preparar pasta fresca en casa con esta máquina ofrece ventajas notables sobre la opción comercial. En primer lugar, el sabor y la textura son distintos. Al hacerse la masa en casa, la pasta mantiene un aroma fresco y una textura más tierna al cocerse, algo difícil de igualar con la pasta seca de supermercado.
También supone un ahorro económico a medio plazo. Gastar menos de 30 euros en la máquina puede amortizarse en pocas cenas, especialmente si se consume pasta con frecuencia. Eso sin contar la satisfacción de cocinar con tus propias manos (aunque sea ayudado por el aparato).
Por otro lado, la máquina permite variar ingredientes al gusto. Quienes lo deseen pueden usar harinas sin gluten, introducir especias, añadir espinacas o tinta de calamar a la masa, adaptando la receta al gusto personal sin depender de lo que ofrece la industria alimentaria.
Consejos para aprovechar al máximo la máquina de Lidl
Para lograr una pasta de calidad conviene medir bien los ingredientes. Usar los vasos medidores incluidos ayuda a que la masa tenga la consistencia adecuada. Seleccionar el disco correcto marca la diferencia, ya que un disco fino sirve para tallarines, mientras que uno más grueso para raviolis.

Otro consejo útil es amasar y dejar reposar la masa si vas a manipularla a mano antes de pasar por la máquina. Esto mejora la textura y facilita el moldeado. Aun así, la máquina es ideal para quienes buscan practicidad y rapidez.
Cabe destacar que la mayor comodidad también llega tras la cena. Todas las piezas extraíbles son aptas para el lavavajillas, salvo el panel frontal, lo que simplifica mucho la limpieza posterior.




