

Elon Musk es uno de los magnates tecnológicos más relevantes de la actualidad. Entre sus ideas más vanguardistas se encuentran el desarrollo de la Inteligencia Artificial omnipresente, microchips en el cerebro y la conexión de internet satelital a lo largo de toda la Tierra. Sin embargo, algunas de sus declaraciones más controvertidas están relacionadas con la jornada laboral y el tiempo de trabajo de sus empleados.
Esta visión, por supuesto, no está exenta de críticas. Sindicatos y analistas laborales han expresado su preocupación por lo que consideran un retroceso en derechos adquiridos. No obstante, el millonario se ha mantenido firme: "Las personas que logran cosas extraordinarias no lo hacen trabajando de 9 a 5. Lo hacen cuando están obsesionadas con su propósito", sostuvo.

De ese modo, el empresario ha estado en el centro de la controversia desde febrero, tras hacer pública en la red social X su propuesta de que los trabajadores presten sus servicios laborales 120 horas a la semana, incluyendo el trabajo durante los fines de semana.
Las ideas de Elon Musk parecen inspiradas en la mitad del siglo XVIII y un poco más atrás de la Revolución Industrial, donde los trabajadores debían cumplir con un tiempo entre 80 y 100 horas de trabajo por semana.
Estas exigencias se dieron en el marco del organismo público DOGE, para el gobierno de Donald Trump. "No hay forma de transformar un sistema ineficiente trabajando a medio tiempo", afirmó en una entrevista con el canal estadounidense CNBC en abril de este año, cuando estaba al mando de la administración. El empresario sostiene que la única manera de superar la burocracia y optimizar el uso de recursos es duplicando el esfuerzo humano.

La controversia laboral de Elon Musk en Neuralink
En el actual contexto de exigencias laborales desmesuradas, ha resurgido en las redes una controversia empresarial que involucra a Elon Musk y su empresa de chips cerebrales, Neuralink. Esta organización tiene como objetivo primordial asistir a personas en la recuperación de sus capacidades mediante tecnología que facilita la estimulación cerebral directa en pacientes con trastornos neurológicos.
No obstante, en 2022, la agencia Reuters reportó que el magnate tecnológico se vería sometido a una investigación federal debido a las prácticas realizadas con animales en los ensayos de Neuralink. Los esfuerzos por acelerar el desarrollo de los chips implantables resultaron en el sufrimiento de numerosos monos, lo que llevó a la apertura de un expediente administrativo.
Los propios empleados de Neuralink corroboraron a Reuters los métodos del empresario en su búsqueda de avances acelerados para la tecnología. Algunos trabajadores de la organización informaron a la agencia de noticias que Musk "solicitó a sus empleados que imaginaran que tienen una bomba atada a la cabeza para que avancen más rápido", según lo indicado.

La ética laboral en la estructura empresarial de Elon Musk
El enfoque de Musk no se limita únicamente al ámbito gubernamental o a su empresa Neuralink. En empresas como Tesla y SpaceX, las jornadas laborales extensas han sido una constante durante años. "Si estás en Tesla, se espera que vivas en la fábrica. Literalmente", afirmó Elon Musk en una conversación con sus empleados. Para él, el sacrificio personal es una muestra de compromiso con la misión de la compañía.
Asimismo, el empresario ha comparado sus propias rutinas con las exigencias que impone a sus equipos: "Dormí en el suelo de la fábrica muchas veces. Si yo puedo hacerlo, cualquiera en mi equipo puede", explicó en una ocasión.
Elon Musk tiene el objetivo de legitimar su visión y exigencias con este tipo de declaraciones. De este modo, reafirma su ética laboral radical y exigente, que prioriza el trabajo sobre el tiempo libre, el descanso o la vida familiar.



