Pexels
En esta noticia
Las bananas y los plátanos se encuentran entre las frutas más consumidas en nuestro país. No solo ofrecen una variedad de beneficios -son ricos en potasio, vitaminas y fibra-, sino que también contribuyen a la salud cardiovascular, regulan el tránsito intestinal y disminuyen la fatiga física y mental.
A pesar de su delicioso sabor, existe un aspecto que afecta a todos los consumidores y que a menudo nos lleva a evitar esta fruta: el cambio de su color amarillento a un marrón oscuro.
El sencillo truco de los fruteros para conservar los plátanos frescos
Es ampliamente reconocido que las frutas y verduras exhibidas en los estantes de una frutería deben, en primer lugar, atraer la atención del cliente visualmente. Por esta razón, en los establecimientos dedicados a la venta de frutas se presta especial atención a la presentación del producto, evitando que los plátanos y las bananas presenten manchas oscuras.
El conocimiento de los fruteros para prevenir el oscurecimiento de estos alimentos radica en la prohibición de almacenarlos en las cámaras frigoríficas o neveras, dado que se trata de frutas tropicales. Por lo tanto, la forma más efectiva de permitir que maduren adecuadamente y sin oscurecerse rápidamente es mantenerlas a temperaturas que oscilen entre los 10º y los 20º, tal como se indica en el sitio web Gastronomía & Cía.
En consecuencia, lo más recomendable es conservarlas a temperatura ambiente, salvo durante los meses estivales.
Consejos para mantener plátanos y bananas frescos por más tiempo
Uno de los métodos más efectivos consiste en mantener las frutas y verduras alejadas de fuentes de calor, frío y corrientes de aire.
Asimismo, una técnica igualmente eficaz presentada en el canal de YouTubeCómo se hace sugiere que, para evitar la rápida oxidación de una fruta, es fundamental envolver su pedúnculo con papel de aluminio. Este material, según la demostración proporcionada, permite que las frutas se conserven en óptimas condiciones durante un período de hasta diez días.
De igual manera, para asegurar su adecuada conservación, se recomienda no colocar ningún tipo de peso sobre ellas. Además, es imperativo evitar almacenarlas en bolsas de conservación, como proponen algunos métodos caseros.
