

A la hora de imponer sanciones, la Dirección General de Tráfico (DGT) suele hacer multas económicas, las cuales varían dependiendo de la gravedad de la falta. De esta manera, el organismo busca hacer comprender a los conductores que una infracción, aunque no lleve a un accidente, tendrá consecuencias.
Esta no es la única forma en la cual se sanciona a quienes no cumplen las leyes vigentes. Tráfico también cuenta con el sistema de puntajes en los carnets de conducir. De esta manera, dependiendo de la falta, se le resta al infractor una cantidad preacordada en la legislación vigente.
Por lo general, la única forma de recuperar esos puntos era a través de programas especiales, a los cuales los conductores debían acudir. Sin embargo, esto parece haber cambiado.
El fin de los programas para recuperar puntos
Hasta el año pasado, aquellas personas que habían perdido puntos en su carnet podían realizar programas en autoescuelas. Esto se daba a través de un convenio entre la DGT y la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE).
Sin embargo, al no materializarse un nuevo acuerdo entre las partes, el organismo público ha decidido eliminar estos cursos, al menos por el momento.
Esto no solo impacta los beneficios futuros de las autoescuelas, sino también los pasados, ya que estas han tenido que reintegrar los pagos de aquellos conductores que ya habían contratado el servicio.

La fecha límite a partir de la cual ya no se podrán impartir estos cursos de redención de infracciones de tráfico es el miércoles 19 de julio.
De esta forma, muchos conductores ya no tendrán la oportunidad de limpiar su historial de infracciones, incluso algunos podrían perder su permiso, con todas las repercusiones que esto puede tener.
No hay certezas sobre la restitución de los programas
La CNAE, por su parte, ha comenzado a trabajar para intentar aclarar y revertir la situación. Pero con tan poco tiempo para reaccionar, parece poco probable que se pueda renovar los acuerdos antes de la fecha límite.
Esto obligará a las autoescuelas a reembolsar cientos de pagos de conductores que buscaban rehabilitación.
El futuro de estos cursos es aún incierto. Lo único que se ha suprimido, por ahora, es la posibilidad de que los impartan las autoescuelas privadas, limitando el acceso y la cantidad de plazas disponibles.
Aún no se sabe si esto dará lugar a un nuevo modelo en el que el propio sector público se encargue de impartir estas clases.






