

El empresario kirchnerista Lázaro Báez abrió a la prensa las puertas de su chacra, en las afueras de la ciudad santacruceña de Río Gallegos, para desmentir que tenga una bóveda en un quincho y aseguró que quienes lo acusan “pensarán” que es “una bala de plata para la presidenta” Cristina Fernández.
“Yo no tengo nada escondido, en mi declaración personal está todo, yo vivo en Santa Cruz”, sostuvo Báez, quien mostró parte de su casa, donde tiene una bodega, y remarcó que “no” habló últimamente con la jefa de Estado.
El empresario descalificó las denuncias sobre las denuncias de supuesto lavado de dinero y apuntó contra Mariana Zuvic, la referente del ARI santacruceño, al sostener que “es como la Lilita (por Elisa Carrió): sigue a su jefa tal cual es‘, y advirtió motivaciones políticas en las acusaciones hechas desde el programa del periodista Jorge Lanata: ‘Pensarán que soy una bala de plata para la Presidenta”, aseveró.


