El Gobierno busca desacoplar precios internacionales sin subir retenciones y maximizar la recaudación para tener margen de política social en un contexto de suba de la inflación. En ese marco, el ministro de Economía, Martín Guzmán,anticipó que trabaja en un proyecto para captar la renta extraordinaria que generó en los exportadores agrícolas la guerra en Ucrania.

El ministro indicó durante una entrevista en C5N el lunes por la noche que por la situación internacional de suba de precios de commodities "hay una renta grande para determinados sectores", pero aclaró que "se tomó la definición política de no subir las retenciones".

En casi dos meses de conflicto tras la invasión rusa, la cotización del trigo acumula una suba del 38% y el girasol llega al 16%, después de un salto del 37% el mes pasado. La soja marcó una suba del 16% y el maíz se acomodó con una suba de los precios internacionales del 5%.

Para Guzmán, es necesario encontrar un mecanismo para redistribuir las ganancias inesperadas que se generan y que no son fruto de un mayor esfuerzo humano o mayor inversión. "Estamos buscando un mecanismo sin tocar los derechos de exportación que permitan redistribuir las rentas extraordinarias", planteó.

Las ganancias extraordinarias por la guerra en Ucrania, en la mira del Gobierno
Las ganancias extraordinarias por la guerra en Ucrania, en la mira del Gobierno

"Esto requerirá del apoyo del Congreso", aclaró el ministro y la finalidad será aplicarlo a los sectores más vulnerables. El modelo que se analiza es comparable con el aporte solidario por única vez que se generó por la pandemia y aplica a los sectores atados a los commodities.

"Estamos trabajándolo. Hoy hay una situación de ganancia por un shock que no tiene nada que ver con la acción humana. Eso, si no se hace algo, es regresivo", indicó el titular del Palacio de Hacienda.

La propuesta de trabajar sobre un ingreso extraordinario podría cerrar la grieta con el Kirchnerismo a la hora del trámite legislativo. Desde el sector que responde a Cristina Kirchner pusieron en marcha un proyecto de blanqueo para pagarle al Fondo Monetario Internacional (FMI) y el proyecto de Guzmán, como lo presentó, habilita a tener más margen para el gasto social.

Para el tributarista César Litvin, del estudio Lisicki Litvin y Asociados, la forma de instrumentarlo es a través de un "impuesto especial para rentas extraordinarias" para captar la renta de los commodities. "El contribuyente argentino no tiene más tolerancia para que le siguan agregando impuestos advirtió", y consideró que el Gobierno "usa la palabra extraordinario con mucha frecuencia".

Mientras busca fondeo alternativo, el ministro defendió su hoja de ruta, plasmada en el programa del FMI: insistió en acumular reservas, bajar el déficit y la emisión monetaria. "Hay que depender menos del financiamiento monetario", remarco, aunque indicó que la inflación no es un fenómeno exclusivamente atado a la emisión.