A menos de dos semanas del cambio de gobierno, las empresas de consumo masivo seguían sin tener precisiones sobre si el presidente electo Javier Milei implementará alguna política de precios y todo indica que buscará una liberalización rápida para alinear precios relativos. Con remarcaciones que aceleraron luego del balotaje, las consultoras ya estiman un IPC mensual de entre 12 y 15% para este mes y valores más altos para el próximo trimestre.
Hasta este martes, el gobierno electo no había iniciado reuniones de transición con la Secretaría de Comercio que conduce Matías Tombolini y que contiene los aumentos de productos masivos y otros, con cada vez menor éxito ante la inminencia del cambio de régimen.
Los fabricantes de productos de consumo masivo acordaron, la semana pasada, enviar listas a supermercados con subas de 5% para productos básicos y hasta 12% para el resto, aunque llegaron listas con incrementos de hasta 50% que las grandes cadenas rechazaron. Si bien hay otro aumento pactado para los próximos días, del 8%, luego habría vía libre para que "el mercado" resuelva los nuevos valores de equilibrio. A eso se sumaron, esta semana subas en naftas y carnes.
Precios atrasados y devaluación
Será una ecuación compleja. Según fuentes de la industria alimenticia, los precios en supermercados venían rezagados en torno a 50% hasta las PASO. Luego hubo reacomodamientos, una devaluación que se trasladó íntegramente a la góndola y las subas de los últimos días. Aun así, indican en una gran empresa, los precios siguen retrasados y, lo que es más importante, atados al tipo de cambio oficial. Una devaluación al inicio de la nueva gestión dispararía un nuevo shock al IPC.
Eco Go midió, en la semana post balotaje, un salto en el IPC del 8%, el relevamiento semanal más alto desde la devaluación posterior a las PASO. "La proyección para el mes apunta al 15%", advirtió en un reporte.

LCG, que mide semanalmente la evolución de precios de alimentos y bebidas, registró, en la tercera semana de noviembre, una suba de 4,3%, la más alta en un año. El porcentaje de productos con aumentos semanales promedia 42% en las últimas cuatro semanas, lo que supone que cada producto tiene dos aumentos por mes. En la misma línea, el IPC que elabora el Centro de Estudios de la Bolsa de Comercio de Bahía Blanca subió 4,3% semanal justo después del balotaje.
Diciembre caliente
No se detendrá ahí. Eco Go prevé "un diciembre en el que la inflación sería potencialmente peor", ya que "al arrastre de noviembre se le sumaría la corrección de los precios relativos (dólar y tarifas) en el arranque del nuevo gobierno".

Martín Kalos, director de Epyca, coincide con ese diagnóstico, que anticipó el propio Milei al enfatizar que se venían meses de alta inflación por el reacomodamiento de los precios relativos.
"La libertad del sistema de precios tiene sentido dentro de su plataforma", evaluó. "Probablemente, muchos precios atrasados, como la medicina prepaga o la nafta, van a subir. En el medio, ante la expectativa de devaluación, hay aumentos de precios como cobertura. Vemos una aceleración inflacionaria en estas semanas, y esta semana fue muy fuerte en alimentos y artículos de limpieza", afirmó el economista.
La consultora 1816 hizo una estimación de cuán atrasados están algunos precios, comparando su peso relativo en el IPC en diciembre de 2019 y en la actualidad. Llegó a la conclusión de que -con el supuesto de que los precios estaban alineados en el ocaso del gobierno de Mauricio Macri- la inflación reprimida roza el 43%. Llegaría a casi 120% en tarifas de electricidad, gas y agua, sería del 56% en los ítems vinculados al transporte y rozaría el 25% en Alimentos y bebidas.
A esos reacomodamientos que anticipó Milei se sumarían, en una segunda instancia, los de las tarifas de los servicios públicos, que requieren una instancia de audiencia pública. Sin embargo, hay subsidios que pueden comenzar a desandarse, como ya demostró el gobierno de Alberto Fernández en el último año de gestión, con Sergio Massa como ministro de Economía.




