La Asamblea en la que los afiliados del Sindicato de Comercio de Capital iban a votar la memoria y balance de los últimos dos períodos estuvo a punto de suspenderse hoy en Parque Norte, tras una serie de incidentes que la directiva que lidera el veterano Armando Cavalieri atribuyó en un comunicado "a un minúsculo grupo de la lista opositora -que con Ramón Muerza a la cabeza pretendía suspender un acontecimiento democrático".
Según fuentes gremiales, los incidentes, en los que volaron algunas sillas y trompadas, provocaron que la asamblea pase a un cuarto intermedio tras el cual "más de 4 mil trabajadores/as aprobaron -por unanimidad- la Memoria y el Balance general de los ejercicios correspondientes a 2019-2020 y 2020-2021 respectivamente", señala el mismo comunicado, que incluso alude a que el tramite pudo concretarse "pese a la indiscriminada violencia y agresión física que debieron padecer mujeres, jubilados/as, y dirigentes genuinos de nuestra organización sindical".
Cavalieri repudió "la construcción de la política en base al odio, las patotas, la intimidación y el apriete contra lo más preciado que tiene nuestro gremio: los/as trabajadores/as y la democracia sindical".
No es la primera vez que la interna entre Cavalieri y Muerza se expresa en forma violenta. Otrora aliados, ambos dirigentes llevan adelante una disputa por el control del sindicato que ni las elecciones regulares logran saldar.
De hecho, en la renovación de autoridades de 2018 el dirigente opositor llevó hasta la Justicia sus denuncias de fraude, pero fueron desestimadas. Como consecuencia de esa decisión judicial, las elecciones pudieron realizarse y, en una ajustada votación, Cavalieri extendió su mandato al frente del gremio, hoy de 39 años ininterrumpidos.
En esa oportunidad, también se produjeron incidentes, en este caso durante el acto de asunción de autoridades, que debió mudarse a otro edificio, ya que la sede central de Moreno al 600 fue territorio de hechos de violencia que incluyeron pedradas y gases lacrimógenos tras el intento de la gente de Muerza de tomarla: "Fuimos a asumir al gremio y no nos dejaron entrar", declaró el dirigente a Clarín en esa oportunidad.
Muerza, que durante años fue del riñón de Cavalieri, es aliado de Hugo y Pablo Moyano, con quienes incluso pactó una política común para intervenir en el conflicto de Garbarino.

Cavalieri y Moyano llevan años enfrentados, un historia que se remonta a las primeras peleas entre ambos por el encuadramiento de trabajadores de supermercados.


