

Los fondos buitre podrían ampliar a Panamá la investigación que consiguieron impulsar en un juzgado de Nevada, Estados Unidos, en torno a los bienes de Lázaro Báez con lo que pretenden cobrarse al menos parte de la deuda que les reconoció la Justicia norteamericana por los bonos argentinos defaulteados que conservan en su poder.
Ayer hubo una segunda audiencia en esa causa que lleva el juez federal Cam Farenbach y que tienen como centro de atención una serie de empresas adjudicadas al empresario patagónico de abierta cercanía con el Gobierno de Cristina Kirchner.
En esa reunión, según publicó el diario La Nación, los representantes de los holdouts argumentaron que por lo menos una de las empresas investigadas (Mosak Fonseca de Nevada) tiene una firma homónima en Panamá y son, en realidad, una sola compañía, por lo que, en términos jurídicos, podría convertirse en un "álter ego".
Si el juez acepta ese planteo, podría ampliar la pesquisa a Panamá, donde los buitres creen que está la mayor parte de la información sobre la ruta del dinero de Lázaro Báez que, siempre según el planteo de los holdouts, al supuestamente provenir de la corrupción la Justicia podría embargar para que ellos se cobren la deuda que les reconoció el juez de Nueva York Thomas Griesa en fallos que ya quedaron firmes.
En el marco de la causa de Nevada, el periodista Jorge Lanata consiguió convertirse en parte y como tal busca que se liberen documentos que se mantienen en reserva porque, argumenta, pueden ser "de interés" para la sociedad. Ayer su abogado reiteró el pedido y habría una respuesta del juez el 3 de abril.


