Con amplio apoyo, la comisión de Legislación General de la Cámara de Diputados firmó ayer dictamen favorable al proyecto de Ley de Alquileres que impulsa el oficialismo y que, según prevé el titular de esa comisión, Daniel Lipovetsky, será debatido en el recinto antes de fin de año. Con mucha resistencia de las inmobiliarias y fuerte apoyo de las asociaciones de inquilinos, el texto modifica la media sanción que el Senado dio al tema en 2016, por lo que la Cámara alta deberá luego definir si convalida los cambios.

Firmaron el dictamen los diputados de Cambiemos, del PJ-Frente para la Victoria (PJ-FpV), del bloque Justicialista y algunos del Frente Renovador, como Felipe Solá. Todos, excepto los oficialistas, pidieron algunos cambios. Lipovetzky se mostró dispuesto a concederlos. Otros legisladores del massismo, como Carla Pitiot y Marco Lavagna, impulsarán un proyecto propio.

La reunión comenzó con las exposiciones de Gervasio Muñoz, de la Federación Nacional de Inquilinos; de otras asociaciones de inquilinos de La Plata y Rosario; del presidente del Colegio Único de Corredores Inmobiliarios de la Ciudad de Buenos Aires (Cucicba), Armando Pepe; y de representantes de martilleros e inmobiliarias bonaerenses y correntinos, entre otros. Los corredores inmobiliarios cuestionaron con dureza el texto. Según Pepe, el plazo mínimo de tres años para los contratos "es muy largo"; que los propietarios deban aceptar recibos de sueldo como garantía "preocupa seriamente"; y que las comisiones deban pagarla los dueños es perjudicial para las inmobiliarias.

La mayoría de los diputados que habló, cuestionó su postura. "Queremos compensar los desequilibrios de poder. Las inmobiliarias preferirían ninguna ley. Creen que toda regulación es mala. No estamos de acuerdo", señaló Solá, quien pidió modificar el artículo 2 del proyecto, que exime de la ley a los inmuebles valuados en más de 3.000 UVAs para el caso de viviendas y más de 5.000 UVAs para alquileres comerciales. "¿Por qué no vamos a regular a los locadores más ricos? O no regulamos a ninguno o regulamos a todos", reclamó.

La diputada del Movimiento Evita Araceli Ferreyra pidió incluir un artículo con perspectiva de género, para prohibir discriminación por género, condición sexual o cantidad de hijos en los alquileres. Y también cargó contra los corredores inmobiliarios presentes, que por momentos tensaron el clima con comentarios en voz alta y aplausos para las posturas contrarias al proyecto. "Veo acá a inquilinos y a corredores inmobiliarios. Lo que no veo es a los propietarios. Los representan ustedes, me parece", les espetó Ferreyra, luego de que los representantes de las inmobiliarias insistieran durante sus exposiciones en que defienden los intereses de propietarios y locatarios por igual.

El PJ-FpV exhortó a que el Congreso sancione la ley antes de que termine el año y pidió cambios en la mayoría de los artículos. El principal de ellos: que la actualización de los alquileres sea anual, tal como había votado el Senado, y no semestral, como propone Cambiemos. Y que esa variación surja de la evolución de los salarios y no de un promedio entre salarios e inflación, como figura en la propuesta actual.