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Alquilar una vivienda puede parecer un trámite común y sencillo, pero en Colombia existe un mecanismo legal que puede cambiar radicalmente la situación de muchos inquilinos: un desalojo acelerado y sin previo aviso.

Laley de alquileres tiene huecos en los que los propietarios pueden arreglárselas para solicitar la devolución del inmueble aunque solo haya pasado un mes desde la firma del contrato. Para esto, los inquilinos deben incurrir en ciertas faltas.

La Ley de Alquileres en Colombia deja el lugar para los desalojos acelerados (Fuente: archivo).
La Ley de Alquileres en Colombia deja el lugar para los desalojos acelerados (Fuente: archivo).

Ley autoriza el desalojo de un inquilino en este caso común

La ley 820 de 2003 protege a los propietarios cuándo un inquilino no cumpla con las obligaciones pactadas en el contrato de alquiler y habilita a un desalojo acelerado. El arrendador puede ejercer su derecho a solicitar la devolución de la vivienda a tan solo un mes de que haya comenzado el contrato.

Esta norma autoriza al propietario a dar por terminado el contrato y pedir el desalojo del inquilino con motivo de "la no cancelación por parte del arrendatario de las rentas y reajustes dentro del término estipulado en el contrato". Aunque en general se llega a un acuerdo, el propietario no tiene obligación de dar notificación previa ni a brindar un plazo antes de poner una demanda de restitución del inmueble.

Cómo se puede frenar un desalojo

Si hay mora, el arrendador puede demandar la restitución del inmueble. Sin embargo, la Ley 820 en su Art. 22 contempla que si el arrendatario paga la totalidad de la deuda antes de la sentencia, el juez terminaría el proceso y no dictaría la orden de restitución, lo cual podría cancelar el desalojo.

Los desalojos por mora requieren el pago de la deuda para evitarse (Fuente: archivo).
Los desalojos por mora requieren el pago de la deuda para evitarse (Fuente: archivo).

Para evitar situaciones legales y desalojos, se recomienda que las personas cumplan con los pagos correspondientes en tiempo y forma. Mantenerse al día con las obligaciones contractuales no solo previene conflictos con los propietarios, sino que también garantiza estabilidad y seguridad en la vivienda durante todo el periodo de alquiler.

¿Cómo pueden protegerse los inquilinos ante esta cláusula?

Para evitar caer en esta trampa legal, es clave actuar con precaución antes de firmar cualquier contrato. Algunas recomendaciones clave son:

  • Leer todo el contrato detenidamente: revisar cada cláusula con atención, especialmente aquellas que intentes limitar derechos legales establecer procedimientos de arbitraje que sustituyan la vía judicial.
  • Consultar con un abogado especializado: ante cualquier duda sobre el contrato, solicitar asesoramiento a un profesional en derecho inmobiliario.
  • Negociar condiciones antes de firmar: en caso de detectar una cláusula abusiva, solicita al arrendador que las elimine o modifique.
  • Denunciar cláusulas abusivas: si ya firmaste un contrato con condiciones que vulneran tus derechos, puedes presentar una queja ante la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) o acudir a mecanismos de conciliación para proteger tu derecho al debido proceso.