Luego de la iglesia maradoniana llegan las torres del diez

El arquitecto Alberto Cioffredi patentó la idea y pide u$s 1,5 millones para venderla. Será un edificio de 26 pisos que tendrá la forma de un número 10 y, se estima, se usará como shopping, centro de convenciones o como un hotel para albergar a selecciones de todo el mundo

Todo tipo de homenajes le han realizado a Diego Maradona. La despedida de 2001 en la Bombonera, bebés nacidos en toda década bautizados con sus nombres e incluso un estadio, el de Argentinos Juniors, que lleva su firma. La lista se multiplica, ya sea en el país o en Italia, donde en los 80 brilló en Napoli. Sin embargo, ni el propio Maradona debe haber imaginado alguna vez que a un arquitecto se le iba a ocurrir planear la construcción de un edificio en su honor. Pero la loca idea también surgió de un profesional maradoniano que rotula al crack como el futbolista más grande de la historia.
Alberto Cioffredi es profesor de dibujo técnico de la Escuela Raggio en Buenos Aires, y principal impulsor de esta particular iniciativa. La idea se me ocurrió hace ocho años, pero recién hace dos fui a patentarla al Registro de Marcas y Patentes a matricular el concepto de edificio, dijo Cioffredi. Su obra, llamada MDA10, no tendrá ni la forma de la cara o del pie zurdo de Maradona, sino que serán dos torres de 26 pisos que representarán el 10, número característico del astro del fútbol mundial. Toda ciudad importante tiene un edificio ícono que la identifica, pero ninguna tiene la capacidad de homenajear a la personalidad de un individuo. Sería como la Torre Eiffel para París, comparó el arquitecto argentino.
Cioffredi confía en poder encontrar inversores para llevarla a cabo en el mediano plazo. Su excéntrica obra, según él, sería ideal para alojar oficinas, como shoppings, centro de convenciones, o incluso hoteles. Imagino a las principales selecciones del mundo hospedándose en el MDA10 cuando deban jugar en el país. El plan ya tiene el visto bueno de Pasion Unlimited, la empresa que maneja los derechos representativos de Maradona. Ya concretamos el acuerdo con ellos. Ahora podemos asegurar que esto generará un creciente interés, tanto turístico como interno, y que se consagrará como un ícono arquitectónico mundial para el más grande futbolista de todos los tiempos. Aquellos inversores a los que les pueda interesar el proyecto deberán pagar u$s 1,5 millón o, en su defecto, u$s 900.000 garantizando que el creador del mismo (Cioffredi) tenga participación con un beneficio anual del mobiliario.
Según un informe de Euroaméricas Sport Marketing que publicó el Financial Times, la Marca Maradona está valuada en cerca de u$s 120 millones. Gerardo Molina, CEO de la consultora, considera que el ídolo representa una marca que genera impulsos emocionales que la gente quiere comprar, contra toda racionalidad. Tal vez en esa opinión de Molina pueda comprenderse por qué diseñar un edificio gigante en homenaje a un ídolo deportivo como Maradona puede ser un innovador y rentable negocio. En Argentina, al menos.
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