

El Departamento de Estado de Estados Unidos puso en pausa las entrevistas para otorgar visa a quienes buscan estudiar o realizar intercambios en el país. La decisión fue impulsada por el secretario de EstadoMarco Rubio, quien ordenó frenar el proceso mientras se profundiza el control sobre las redes sociales de los solicitantes. Esta nueva resoluciónafecta a todos los extranjeros con planes de viajar a Estados Unidos con fines académicos.
Según reportó The New York Times, la medida fue enviada a embajadas y consulados. Tiene como objetivo permitir más tiempo para revisar el historial digital de quienes desean una visa.
La pausa genera incertidumbre entre quienes ya tenían fechas asignadas y ahora deben esperar nuevas instrucciones.
Marco Rubio endurece los filtros para estudiantes y académicos extranjeros
Desde marzo, Marco Rubio dejó claro que su postura frente a los extranjeros que desean viajar a Estados Unidos incluye un enfoque más estricto. A través de un cable oficial, exigió a los funcionarios consulares revisar el contenido de redes sociales de ciertos solicitantes, bajo estrictas políticas migratorias.
Las cuentas quedan sujetas a evaluación por parte de la "unidad de prevención del fraude".

En palabras del propio Departamento de Estado, la verificación busca garantizar que los solicitantes no representen "riesgos" para el país. Esta revisión más rigurosa se centra en:
Publicaciones previas en redes sociales
Vinculaciones políticas o activismo
Comentarios sobre conflictos internacionales
Asociación con grupos universitarios críticos de Israel
La administración de Rubio ya revocó más de 300 visas, muchas de ellas otorgadas a estudiantes. Incluso retiró la residencia permanente a casos puntuales, como el del estudiante Mahmoud Khalil, acusado de ir contra la política exterior del país.

¿Qué pasará con quienes ya tenían su entrevista agendada para viajar a Estados Unidos por estudios académicos?
Aunque la pausa es general, el Departamento de Estado aclaró que quienes ya cuentan con una cita podrían mantenerla. Aun así, no hay garantías firmes, ya que los lineamientos están en proceso de actualización.
Las universidades de Estados Unidos, que dependen en gran parte de alumnos internacionales, ven con preocupación la nueva postura. Solo en 2023, más de 1,3 millones de extranjeros obtuvieron títulos en centros educativos del país. Esta decisión podría cambiar ese panorama radicalmente.


