En esta noticia

Un reciente estudio liderado por expertos de la Universidad de Tecnología de Queensland (QUT) proporcionó nuevas evidencias que acercan aún más la posibilidad de que Marte, en algún momento de su historia, haya albergado vida.

Los científicos analizaron datos del rover Perseverance de la NASA y realizaron un importante descubrimiento para el campo: hallaron "pruebas convincentes" de diversos eventos de formación de minerales debajo de la superficie del planeta rojo.

Este descubrimiento es clave para comprender cómo se esparcía el agua por Marte, pues los minerales detectados por el rover sólo pueden formarse en presencia de este recurso vital.

Científicos hallaron pruebas de formación de minerales bajo la superficie de Marte. Fuente: archivo.
Científicos hallaron pruebas de formación de minerales bajo la superficie de Marte. Fuente: archivo.

Qué descubrieron los científicos de Marte

El equipo liderado por el Dr. Michael Jones identificó dos generaciones distintas de minerales de sulfato de calcio en el cráter Jezero: una en capas superficiales y otra a unos 80 metros de profundidad. Los hallazgos se encuentran publicados en la revista Science Advances.

"Este descubrimiento pone de relieve la diversidad de entornos que existieron en la historia de la formación Shenandoah, lo que indica múltiples ventanas en las que la vida podría haber sido posible en Marte", afirmó el Dr Michael Jones, director del equipo.

El descubrimiento se realizó implementando un innovador método desarrollado por la QUT que permitió a los científicos medir directamente estructuras cristalinas en rocas marcianas, algo que hasta ahora se consideraba inalcanzable fuera de la Tierra.

Una de las principales misiones del rover era estudiar los entornos marcianos que pudieron haber sido habitables. Fuente: archivo.
Una de las principales misiones del rover era estudiar los entornos marcianos que pudieron haber sido habitables. Fuente: archivo.

Cómo realizaron los científicos este descubrimiento

Utilizando el método X-ray Backscatter Diffraction Mapping (XBDM), desarrollado por investigadores de la QUT y adaptado al instrumento PIXL del rover Perseverance el equipo pudo determinar cómo y cuándo crecieron las estructuras cristalinas encontradas, brindando una suerte de fotografía de cómo era el Marte cuando cada una de ellas se formó.

"Los minerales de sulfato existen con diferentes cantidades de agua en la mayoría de las regiones de Marte y nos permiten comprender cómo se movía el agua alrededor del planeta, lo cual es clave para comprender su habitabilidad en el pasado", afirmó Jones.

Este avance científico no solo ofrece una visión más detallada del pasado geológico de Marte, sino que también refuerza la posibilidad de que el planeta haya albergado vida en algún momento de su historia.