IRSE DEL PAÍS

Vivir en Estados Unidos: las tres visas que existen para los argentinos, cuánto hay que invertir y cuánto tiempo de residencia dan

El "sueño americano" de irse a vivir a los Estados Unidos es perseguido por muchas personas en el mundo. Y el país ofrece diferentes visas para quienes se animen a invertir en busca de ese sueño, aunque no es tarea fácil.

El sueño de mudarse a los Estados Unidos en busca de trabajo y un lugar donde crear un negocio estable lo tienen muchas personas: el objetivo de asentarse y poder crecer económicamente gracias a las facilidades y la gran cantidad de empleo que se puede encontrar allí es parte del famoso "sueño americano".

Para algunos, permanecerá como un sueño inalcanzable pero para otros es una posibilidad real si la idea es crear un negocio desde cero. El gobierno estadounidense ofrece ciertas visas que permiten la residencia por tiempo indeterminado a personas que buscan invertir en el país.

Hay tres tipos de visas diferentes que cambian según el objetivo de negocios, el tipo de inversión y la cantidad de dinero disponible para invertir en el país. Al mismo tiempo, varía los beneficios que se obtienen, al igual que los permisos y el hecho de ser un residente temporal o permanente. Con esto en mente, estas son las visas a las que se puede aplicar para mudarse a los Estados Unidos.

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VISA PARA COMERCIANTES (E-1)

En primer lugar están las visas para Comerciantes E-1, las cuales están pensadas para personas que trabajan en una empresa y requieren vivir en los Estados Unidos para realizar tareas fundamentales para el funcionamiento de la empresa, cómo lo puede ser un director ejecutivo regional o personal altamente calificado.

Las mismas solo se le otorgan a empleados de empresas extranjeras que cumplan roles "fundamentales e irremplazables" en dichas empresas, requieren vivir en los Estados Unidos para continuar realizando esas tareas y sean parte de una "compañía importante" que dé empleo a un buen número de personas.

Al mismo tiempo, para aplicar a esta visa el comercio debe realizar el 50% de sus actividades económicas con negocios creados entre el país de origen y los Estados Unidos, algo en lo que se incluyen exportaciones, comercio internacional y producción de bienes. La visa no otorga residencia a la persona que la recibe.

VISA PARA INVERSORES (E-2)

Por otro lado, quienes busquen una visa que permita la creación de un negocio en los Estados Unidos deberán aplicar a la visa para Inversores E-2, la cual permite residir por tiempo indeterminado en el país siempre y cuando se esté realizando un "negocio importante" -así se califican a los negocios que ofrecen trabajo a por lo menos 10 ciudadanos norteamericanos-.

Para aplicar se debe presentar un plan de inversión a largo plazo, con el mínimo de planeamiento estableciéndose en cinco años, y dar una declaración en la cual se especifica el origen del dinero a invertir -el mismo debe ser propia (ahorros o herencia) aunque en algunas ocasiones aceptan el uso de un préstamo-.

En cuanto a la cantidad de dinero que se debe invertir en el negocio, la misma no está especificada por fuera de la condición de generar empleo, mientras que las ganancias deben ser bastante mayores al hecho de "cubrir los gastos de las personas dueñas del negocio". El único gasto inmediato es el arancelario respecto al pedido de visa, que representa u$s 205 a pagar al cónsul estadounidense.

La visa permite que residan en el país el inversor principal, su cónyuge y todos sus hijos de menos de 21 años -si tienen más de 21 años deben aplicar a algún otro tipo de visado o no podrán vivir en el país-.

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VISA DE INVERSOR CON RESIDENCIA (EB-5)

Por último está la visa de Inversor con Residencia EB-5, la cual permite al visado vivir en los Estados Unidos cómo residente permanente y obtener los beneficios de ser considerado un ciudadano estadounidense. Eso sí, cuenta con diferentes parámetros que las otras dos visas previamente mencionadas.

Mientras que el hecho de tener que crear -o adquirir- una empresa que de trabajo a por lo menos 10 ciudadanos estadounidenses permanece establecido de la misma manera, la inversión requerida si está especificada: u$s 1.000.000 -hay algunas zonas especiales donde se aceptan inversiones de u$s 500.000-.

Por otro lado, el negocio debe permanecer activo por cierto periodo de tiempo desde realizada la inversión inicial -se calcula que 24 meses desde la primera inversión-, mientras que debe tener un margen de ganancias sustancial -algo que no es obligatorio en caso de ser un "negocio con problemas" adquirido específicamente para realizar la inversión-.

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