Aunque ya comenzó a cumplir su pena, desde el sábado, en una sala especial de la Superintendencia de la Policía Federal en Curitiba, el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva tiene, una vez más, su posibilidad de libertad en manos de los ministros del Supremo Tribunal Federal (STF).

El ministro Marco Aurélio Mello va a usar los primeros minutos de la sesión del miércoles para colocar sobre la mesa un pedido preliminar, formulado por el PEN, para que estén impedidas las ejecuciones anticipadas de la pena hasta que sean juzgadas las Acciones Directas de Constitucionalidad (ADCs) que tratan sobre la prisión después de la sentencia de segundo grado.

Si el tribunal confiere la preliminar, de acuerdo con el ministro, ese resultado influirá indirectamente en el caso de Lula - condenado por el Tribunal Regional Federal de la Cuarta Región (TRF-4) a 12 años y un mes de prisión por los crímenes de corrupción y lavado de dinero.

"Si el Supremo resuelve que es necesario aguardar el análisis del Tribunal Superior de Justicia (antes de ejecutar la prisión), será una nueva situación jurídica", le dijo a Valor.

Entretanto, depende de la presidenta de la Corte, la ministra Cármen Lúcia, definir la orden de juzgamiento de los procesos en el plenario.

El tratamiento de la preliminar, como mínimo, será el tercer ítem de la pauta de ese día, ya que la ministra agendó dos habeas corpus con reos presos que, según las reglas, tienen prioridad: uno del ex ministro Antonio Palocci y otro del ex diputado federal Paulo Maluf (PP-SP).

En la valoración/evaluación de fuentes del Supremo a la que accedió Valor, ésta fue más una estrategia de Cármen Lúcia para posponer, cuanto fuera posible, una nueva discusión sobre el tema, es decir, la prisión después de una condena en segunda instancia - ya en 2016, el tribunal había decidido que la medida era constitucional, pero ha sido presionado para revisitar el tema-. La presidenta ya afirmó que un cambio de la jurisprudencia "empequeñecería" a la Corte Suprema.

El propio ministro Marco Aurélio criticó a su colega por tener pautado, en la semana pasada, el caso específico de Lula, sin tratar las "ADCs", que tratan sobre la ejecución anticipada de la pena de una forma abstracta.

"En términos de desgaste, la estrategia no podría ser peor", dijo durante la sesión que resultó en la negativa del habeas corpus al petista.

Las decisiones de Cármen Lúcia generaron una revuelta en los militantes pro-Lula. El viernes, el predio donde ella vive fue manchado con tinta roja por integrantes del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra y del Levante Popular de la Juventud, que asumieron la autoría del ataque.

La preliminar pedida por el PEN podría haber sido decidida monocráticamente por Marco Aurélio, pero él afirmó que, por preconizar decisiones colegiadas en nombre de la seguridad jurídica, llevaría el caso, esta semana, a la apreciación de los demás ministros. "Voy a hacer lo que me cabe, que es presentar el requerimento y decir que estoy apto para votar. El resto lo decidirá la presidenta", le dijo a Valor.

En caso de que el requerimento prospere en la próxima sesión, la incógnita es, una vez más, el voto de la ministra Rosa Weber. En su voto el último miércoles, ella afirmó que, en el caso concreto, aplica la jurisprudencia actual de la Corte, aunque ese entendimento fuese contrario a su posición personal. La expectativa es de que, analizando el caso en abstracto, Rosa se manifieste contra la prisión después de la segunda instancia y así, se forme un marcador de 6 a 5 -esta vez, favorable a la situación de Lula-.

El PT ya ha dado declaraciones públicas de modo de presionar a Rosa Weber a votar, en la preliminar, por la inconstitucionalidad de la ejecución de la pena antes del tránsito en el juzgado.

"Tenemos la expectativa, el miércoles, de que la ministra cumpla con aquello que habló en el juzgamiento del habeas corpus del ex presidente, de que iría a rever la decisión", dijo la presidenta del partido, senadora Gleisi Hoffmann (PR), tras visitar el campamento de militantes cerca de donde Lula está preso.

Independientemente del pedido de preliminar, los abogados de Lula van a persistir en la Justicia para intentar ponerlo en libertad. Todavía no fue definida cuál será la estrategia, pero ya se considera la presentación de un nuevo recurso ante el STF, que debe ocurrir esta semana, según averiguó Valor. "La defensa continúa trabajando en las medidas jurídicas admisibles para intentar revertir (la prisión)", afirmó el abogado Cristiano Zanin, en un video publicado en Facebook el sábado a la noche, tras la visita del ex presidente a la Policía Federal de Curitiba.

En el mismo video, Zanin dijo que el petista "está bien, aunque indignado" con la situación. "Evidentemente que esa prisión fue decretada sin que hubiese fundamento jurídico, sea por la condena sin base legal, sea porque nuestra Constitución no admite la pena anticipada, que fue el caso impuesto a él".

Los habeas corpus de Palocci y de Maluf no traen como telón de fondo la cuestión de la ejecución provisoria de la pena, esto es, antes de agotados todos los recursos jurídicos a los que un reo tiene derecho.

En el caso del ex ministro de Hacienda, la cuestión principal es la duración de prisión preventiva: condenado por corrupción y lavado apenas en primer grado, sin confirmación de sentencia por el TRF-4, él está detenido desde septiembre de 2016, cuando fue blanco de la Operación Omertà, desdoblamiento del Lava Jato. Los abogados hicieron duras críticas al STF por tener pautado el habeas corpus de Lula, que aún estaba solo, antes del de Palocci, que es prioritario, en razón de haber estado preso.

En relación a Maluf, la Corte va a deliberar si refrenda a no la decisión del ministro Dias Toffoli de concederle el derecho de cumplir la pena en régimen domiciliar, por problemas de salud. Ya condenado en última instancia, él estaba alojado en el ala de ancianos de Papuda, en Brasília