El temor a repetir con las retenciones el derrotero del DNU de las reservas

Por Giselle Rumeau, especial para Cronista.com

El debate que los legisladores de la oposición mantuvieron hoy en la Rural sobre la retenciones agropecuarias, ante la inminente caducidad de las facultades delegadas, arrojó sólo tres conclusiones: que no habrá prórroga en el Congreso de esos poderes extraordinarios; que con ellos se caen unas 2.000 normas que deberán tratarse a futuro; y que existe en el arco anti K la firme voluntad política de buscar consenso para arribar a un proyecto común de retenciones a las exportaciones del campo.

Con el precario acuerdo conseguido en la Mesa de Enlace, los diputados opositores deberán ahora limar sus propias diferencias que -al igual que sucede en las entidades rurales- giran en torno la segmentación de esas retenciones en la soja.

Pero ese no será el principal escollo. Tampoco el paso por la Cámara Alta, donde hoy los números no están del lado de los senadores de la oposición. Aún consiguiendo el preciado quórum propio que permitiera sancionar el proyecto votado en Diputados, algunos legisladores ya avizoran un probable veto presidencial. Y hablan, en ese sentido, de lograr un proyecto “razonable , que sea difícil de vetar.

Los más optimistas aseguran que al caer con las facultades delegadas cerca de 2.000 normas, de las cuales 300 son muy importantes y 33 urgentes -como la facultad de fijar todos los aranceles de exportación e importación- el Poder Ejecutivo no tendrá más remedio que sentarse a negociar indefectiblemente en el Congreso.

Pero también están quienes auguran un horizonte más complejo, acorde al estilo kirchnerista de jugar a todo o nada. Creen que la Presidenta podría firmar un Decreto de Necesidad y Urgencia, amparándose en la ley de Emergencia Económica que estará vigente hasta diciembre del año próximo, para prorrogar las actuales retenciones. Y si bien tanto la oposición como el abogado Daniel Sabsay -que durante el debate sacó a relucir la Constitución y desempolvó toda la biblioteca jurídica- coinciden en asegurar que las retenciones son impuestos aduaneros y por lo tanto sólo puede legislar sobre el tema el Congreso, el argumento del Gobierno sería el mismo del principio: que las retenciones no tienen naturaleza tributaria sino que son derechos de exportación. Así las cosas, el caso podría terminar en la Corte Suprema y levantar la misma polvareda que el DNU que permitió el pago de deuda con reservas del Banco Central.

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