Una nueva oportunidad de inversión premium llega a la Argentina. Crescent Seas, empresa estadounidense especializada en residencias privadas a bordo de cruceros de última generación, inició su desembarco en el país con el objetivo de atraer inversores locales para su ambicioso plan de expansión internacional.

"Apostamos a los argentinos porque disfrutan de la buena vida y eligen viajar por el mundo", afirmó Russell Galbut, cofundador y Chairman de la compañía, durante su presentación en la Expo Real Estate realizada la semana pasada.

El plan de Crescent Seas contempla el lanzamiento de un crucero por año hasta alcanzar un total de 14 embarcaciones. "Los primeros dos barcos se los compramos a Norwegian Cruise Line, el resto los vamos a construir desde cero", explicó Galbut.

Las primeras unidades se comercializarán a bordo del Navigator, que zarpará en su viaje inaugural en diciembre de 2026. Actualmente, la compañía invierte u$s 70 millones en su reacondicionamiento, con un equipo de 1400 trabajadores y un plazo de obra de apenas 55 días.

Cada residencia ofrece vistas panorámicas al océano y acceso a una selección exclusiva de amenities: restaurantes gourmet, spa, club social, centro de bienestar y espacios culturales. El concepto combina inversión patrimonial con un estilo de vida sofisticado y global, orientado a un público de alto poder adquisitivo.

Los itinerarios incluirán los siete continentes, con estadías prolongadas en destinos selectos como Polinesia Francesa, Islas Feroe y Madagascar. Además, bajo un sistema similar al "tiempo compartido", los propietarios podrán intercambiar su residencia con otras embarcaciones de la flota para diversificar destinos.

El Navigator contará con 210 residencias privadas de uno, dos y tres ambientes, con valores que van desde u$s 750.000 hasta u$s 8 millones. "Los inversores argentinos son sofisticados y abiertos a nuevas formas de habitar el mundo, por eso esperamos que jueguen un papel clave en nuestra comunidad", destacó Galbut.

No es casual la elección de Argentina como uno de los primeros mercados de desembarco: según el empresario, el 10% de los clientes de sus desarrollos inmobiliarios en el sur de Florida son argentinos.