Con costos de construcción que se duplicaron en un año y precios de venta que apenas subieron un 20%, las desarrolladoras inmobiliarias ven en la nueva línea de créditos en dólares del Banco Nación una herramienta clave para reactivar proyectos.
El ministro de Economía, Luis Caputo, anunció la medida en la apertura de la Expo Real Estate en el Hotel Hilton, señalando que el financiamiento estará disponible para desarrollos urbanos y suburbanos, con plazos de hasta 72 meses y tasas competitivas.
La propuesta incluye la posibilidad de transferir el crédito al comprador final, lo que permitiría sostener la cadena de financiamiento en el sector.
"La industria está en un momento de inflexión. Construir hoy no es rentable, pero este anuncio es una señal positiva", afirmó Damián Tabakman, presidente de la Cámara de Desarrolladores Urbanos (CEDU) durante la apertura del Congreso.
Caputo reconoció que las altas tasas en pesos y los plazos cortos siguen limitando la actividad, pero sostuvo que la macroeconomía "se está estabilizando" y que es momento de invertir.
"El mercado de capitales tiene que crecer, pero ustedes pueden hacer mucho", opinó el titular del Palacio de Hacienda. Y deslizó: "Si hay un mercado de capital, ¿están los desarrolladores preparados para recibir a ese mercado? No lo tengo claro. Yo veo que el Real State se maneja más en un ámbito familiar, de amigos, contacto".
En ese sentido, consideró que en el sector "tienen que tener estructuras para captar ese financiamiento", debido a que en el exterior "el interés por invertir es fenomenal". Sin embargo, enfatizó que los inversores "necesitan un paraguas, un marco jurídico institucional que los respalde".
El mercado ya empieza a mostrar señales de movimiento: compras de terrenos subastados por la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE), la fusión de Argencons con Consultatio y el desarrollo Ramblas del Plata de IRSA son ejemplos de una reactivación incipiente.
Aun así, el sector reclama incentivos fiscales y mayor apoyo de la banca privada para consolidar el repunte. "Tenemos créditos divisibles reglamentados, pero no son prioridad de los bancos. Falta terminar de encender el motor", concluyó Tabakman.




