COMPRÓ LA FIRMA AGROFINA, QUE FACTURA UNOS U$S 60 MILLONES ANUALES

Los Grobo pone un pie en el negocio local de agroquímicos

Tras vender su negocio de insumos y siembra en Brasil, la compañía da un giro local y se orienta a comercializar productos, y mantiene los servicios de acopio y molienda

Son tiempos de cambio para el gigante agrícola Los Grobo. Acaba de venderle su unidad de negocios en Brasil a Mitsubishi Company, división de la fabricante automotriz, y también anunció novedades en la Argentina.
La firma comandada por Gustavo Grobocopatel, apodado el rey de la soja, informó ayer que se quedó con la totalidad de Agrofina, empresa que elabora y comercializa agroquímicos en la Argentina desde hace más de 30 años.


En diálogo con El Cronista, Grobocopatel evitó especificar el monto de la operación, pero reveló que la facturación de Agrofina, que exporta a la región, Centroamérica, frica y Asia, ronda los u$s 60 millones anuales.
Se trata de una decisión estratégica, que reconfigura al grupo en la Argentina, aseguró Grobocopatel.


El gigante agrícola llegó a sembrar 120.000 hectáreas, entre propias y alquiladas, en el país. Pero en el ciclo agrícola que termina, no serían más de 85.000 las hectáreas sembradas, en un claro giro del negocio.
Del modelo de siembra de granos en campos alquilados que selló su enorme crecimiento de la mano del boom de los precios agrícolas durante la década pasada, el grupo Los Grobo se expandió hacia adelante en la cadena productiva: adquirió acopios en la Argentina, Brasil y Uruguay, y molinos en la Argentina y Brasil. Inclusive, la compañía tiene hoy una fábrica de pastas en Chivilcoy.


La compra de Agrofina se enmarca en un plan de inversiones en el sector de agro-insumos, un área en la que Grupo Los Grobo venía apostando fuertemente en los últimos años, indicó la empresa en un comunicado.
La inversión en Agrofina estará destinada, por un lado, a desarrollar agroquímicos (herbicidas y funguicidas) de nueva generación y de alto valor agregado, mediante la aplicación de nuevas tecnologías que permitirán obtener productos más eficientes y de menor impacto sobre el medio ambiente.


Hasta el momento, el grupo había tenido su mayor experiencia en el rubro de agroinsumos en Brasil. En su proceso de expansión, que lo llevó también a Uruguay y Paraguay, Los Grobo desembarcó en Brasil en 2008, cuando se integró a Ceagro, una firma comercializadora de insumos. Fue adquiriendo participación en esta empresa hasta alcanzar el 80% que ahora vendió a Mitsubishi (ver aparte), y luego, integró todo el negocio en Los Grobo Agroindustrial do Brasil.


En la Argentina, Los Grobo ya tenía un área de Investigación y Desarrollo que ahora se agiganta con los laboratorios de Agrofina, en Vicente López, y el negocio se amplía, fundamentalmente, con la planta de producción de la empresa en Zárate.


La intención de Los Grobo es la de cubrir la red de comercialización que ya implementaba Agrofina, además de poder abastecerse de insumos para su propia producción agrícola.


En el ciclo fiscal 2011/12, Los Grobo facturó a nivel global u$s 1.000 millones, de los cuales el 40% provino de su negocio en Brasil y entre el 35% y el 37%, de la Argentina.

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