Freno importador: ya hay más de 30.000 autos varados en el puerto
La terminal de Zárate está casi colapsada por 17.000 unidades estacionadas en la playa fiscal y siete buques esperando poder descargar los modelos
El sector automotriz, que supo ser uno de los pilares del modelo de crecimiento kirchnerista, ya parece un tablero en el que no paran de prenderse luces de alerta. Luego de un comienzo de año en el que llamaron la atención las caídas tanto en las ventas como en la producción y en la exportación, ahora la excesiva burocracia que aplica el Secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, a las importaciones acaba de generarle al sector un nuevo inconveniente.
En su búsqueda por cuidar los dólares, el funcionario frenó la entrada de 0 km de países extra Mercosur. Así, tanto las terminales como los importadores que ya presentaron sus planes de exportaciones de vinos, muebles, etc para poder cumplir con los cupos, igual no consiguen que se les apruebe las Licencias no Automáticas (LNA) y las Declaraciones Juradas Anticipadas ((DJAI). Esto generó un congestionamiento de alrededor de 30.000 unidades 0 km en la zona aduanera del Puerto de Zárate. También hay autos en los buques a la espera de poder ser desembarcados.
Tenemos 17.000 autos en la Playa Fiscal en un espacio de 230.000 m2 que no se han podido liberar, explicó a El Cronista Alejandro Van Thillo, Commercial Manager en Terminal Zárate. Por allí entra la mayoría de los autos importados que llegan por buque. Las razones no las sé, eso depende de la Aduana, pero no hay más capacidad, y hay siete buques esperando para poder descargar entre 10.000 y 15.000 autos más, agregó. En esa terminal operan BMW, Chrysler, Fiat, Ford, GM, Honda, Iveco, Mercedes Benz, PSA PeugeotCitroen, Renaul, Toyota, Volkswagen, Land Rover, Mitsubishi, Hyundai, Porsche, Chery, Subaru y Volvo. Es decir, casi todas.
Estamos con problemas para poder nacionalizar las unidades de importación, afirmaron en una de las automotrices afectadas. Todavía nos queda algo de stock, pero si la Aduana no comienza a agilizar los trámites va a afectar las ventas, agregó la misma fuente.
Desde la oficina de la Aduana que hay en la terminal portuaria reconocieron que está muy lenta la nacionalización de las unidades. Pero no quisieron explicar los motivos.
Si el escenario no cambia, los problemas no será sólo de espacio en la terminal portuaria, ni de stocks en las concesionarias, con su consecuente pérdida en las ventas. También puede llegar a repercutir en las estimaciones de producción.
Los barcos que están esperando para descargar son los mismos que van a cargas las unidades de exportación, por lo que si no se liberan también se va a llenar la playa de exportación, dijo Van Thillo.
Si eso sucede, en algún momento, repercutirá en las estimaciones de las automotrices que fabrican en el país con una consecuencia trágica: el freno de la producción.
Ocurre que las terminales programan sus producciones pensando en el mercado exterior, que es el más fuerte y que ya evidencia ciertos problemas. Según datos de Adefa, en abril se fabricaron 54.772 unidades con una caída del 27,9% si se comparan estos números con las 42.244 unidades del 2011.
Del total de lo que se envía al exterior, sólo el 16,6% lo hace por barco y el reto en camiones, mayormente con destino a Brasil. En cuanto a la logística por vía marítima se dirige a mercados como Europa y México, necesarios para que el sector automotriz argentino reduzca su brasildependencia.