

Elon Musk cerró un negocio en México que lo vinculó con la compra de más de 1000 hectáreas a nombre de Tesla en el municipio de Santa Catarina, pero la operación está bajo sospecha porque los terrenos que se anunciaron como base para una Gigafactory forman parte de una disputa legal abierta desde hace años.
La transacción desató un conflicto judicial cuando la familia García Jiménez afirmó que fue despojada de sus tierras por medio de un vacío catastral registrado desde 2009, acusación que compromete a funcionarios del Instituto Registral de Nuevo León y pone en duda la legalidad de la venta hecha a Tesla, que se realizó a través de una empresa intermediaria.
Elon Musk: ¿de qué se trata el negocio en México con Tesla y las 1000 hectáreas?
La adquisición de las 1194 hectáreas se concretó a través de Ecological Project Mario, una razón social vinculada a Tesla, con la promesa de levantar una Gigafactory que colocaría a México como eje de producción automotriz en América Latina. Pero la expectativa quedó atrapada en un conflicto legal que no estaba en el radar de Elon Musk.

Según los García Jiménez, los terrenos pertenecen a su familia desde hace generaciones y cuentan con escrituras, testamentos y pagos de contribuciones. Los terrenos habrían sido vendidos por los Garza Ayala, herederos de un exgobernador, pese a que no tenían derechos legales sobre ellos.
La demanda judicial abierta bajo el expediente 1255/2019 incluye acusaciones de fraude y alteración de documentos oficiales por parte de funcionarios del Instituto Registral.
Elon Musk, sin respuesta ante la disputa por las hectáreas en México
María de los Ángeles García Jiménez y su hermano Pedro Manuel presentaron pruebas documentales para reclamar los terrenos desde 2019, pero la compraventa continuó sin que se resolviera el fondo del litigio.
La transacción millonaria se efectuó cuando los terrenos ya estaban en disputa, hecho que la familia denunció por escrito ante el gobernador Samuel García y ante el propio empresario estadounidense.

La falta de respuesta por parte de Tesla abre una interrogante sobre los protocolos que sigue la compañía para asegurar la legitimidad de sus adquisiciones. Mientras el caso sigue en tribunales, el avance de la planta también está en pausa.
El reportaje original fue publicado por Proceso, medio que reveló los detalles del conflicto que hoy compromete a una de las figuras empresariales más visibles del mundo.


