SOS escenario complejo

Separaciones, muerte cercana, despidos y mudanzas son situaciones de duelo que traen aparejados cambios emocionales. ¿Cómo manejarlos para que no repercutan de forma negativa en todos los miembros del equipo?

Las situaciones difíciles en una empresa ponen en evidencia la cultura del equipo de trabajo. Si hay un espíritu de integración y el clima es colaborativo, las personas tienden a solidarizarse y empatizar de una forma genuina. Si el entorno no es bueno, la reacción será más distante.
El mundo extra laboral puede afectar al clima interno de una oficina. Laura Bitocco, gerente General de H&A, dice: "Es necesario que, ante situaciones extremas, la persona pueda tomarse unos días: su productividad mermará y estar dentro de la empresa puede ser contraproducente para todos". Es fundamental que se lo acompañe con conversaciones de calidad, que sienta que la compañía se interesa, que se puedan generar charlas focalizadas en el "cómo estás" -estas conversaciones no deben ser a metros de otros: un café o una sala de reunión permiten mayor relax.
Bitocco detalla que RR.HH. debe ser un facilitador del proceso entre la persona damnificada y sus jefes: ofrecer ayuda y alternativas que le permitan transitar esta situación de la manera más liviana posible. "Debe brindarle al resto del equipo comunicaciones precisas y focalizadas en informar qué sucede, sin entrar en detalles confidenciales", explica Bitocco.
Si bien las situaciones complicadas son difíciles de prever, "puede haber un trabajo anterior en la formación de un grupo que responda a determinados valores. Una buena manera es generar espacios de interacción fuera de la oficina (teamworks, talleres, seminarios) y tener prácticas claras que fomenten la unión y el conocimiento entre el equipo. Debe tener un sustento real. El empleado realmente debe sentir el compromiso de pertenecer a un equipo al cual va a responder cuando las circunstancias se pongan cuesta arriba", destaca Diego Kirschenbaum, director de Capital Humano.¿Cómo debe actuar un líder?Fabián Nicoletti, fundador y CEO de la consultora de IT 2LA, comenta que cuando se trabaja en una empresa uno forma parte de un grupo, una micro sociedad, y como tal, factores ajenos a lo laboral afectan o mejoran la calidad y cotidianeidad. El liderazgo en estos temas no puede mostrar flaquezas. Sí debe mostrar sentimientos y capacidad de contención, pero frente a un grupo diezmado debe ser el referente, y el punto de equilibrio y apoyo.
Ante una situación complicada, "el líder debe identificarla y revisar el nivel de afectación dentro del grupo; analizar los diferentes jugadores y entender los procesos que cada uno de ellos está llevando adelante. Entender cómo debe moverse con cada uno, diferenciando el nivel de aflicción", explica Nicoletti.
Si el problema es de una persona en particular, hay que colaborar a que pueda superar el tema o darle condiciones diferenciadas de trabajo por un lapso de tiempo, para que no se sienta excluida , pero sin afectar el normal desenvolvimiento del grupo y empresa.
Si el tema es grupal, manejarlo a ese nivel y tratando de mantenerlo unido hasta que recobre su fortaleza, pero apoyando a quienes más sufren el impacto y empujando hacia delante a aquellos con mayor fortaleza de espíritu para salir del trance lo antes posible.
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