Trump y Xi alcanzaron un acuerdo sobre comercio en Buenos Aires

Según trascendió, la cena estuvo acompañada por un vino mendocino. En un exclusivo hotel porteño y poco después de finalizada la Cumbre de Líderes del G20, Donald Trump y Xi Jinping acordaron una significativa tregua en la guerra comercial que enfrenta a Estados Unidos y China y que mantiene en vilo a la economía mundial.

"En materia de comercio, el presidente Trump acordó que el 1 de enero 2019, dejará las tarifas en el 10% y no las elevará al 25%", como estaba previsto, a la importaciòn de productos chinos por unos u$s 200.000 millones, informó la Casa Blanca en un comunicado difundido unas pocas horas después de la reunión.

Según el mismo comunicado, China se comprometió a firmar un contrato para adquirir "productos agrícolas, energéticos, industriales y otros de Estados Unidos para reducir el desequilibrio comercial" y acordó "comenzar a comprar de inmediato productos agrícolas" estadounidenses.

Desde la agencia china Xinhua coincidieron, en bases a fuentes del gobierno de Beijing, en que el norteamericano y Xi acordaron que no se impondrían mutuamente nuevas tarifas a partir del 1 de enero. Según Xinhua, los dos mandatarios también acordaron "intercambiar visitas" cuando sea "el momento apropiado".

La esperada reunión entre Trump y Xi, la bilateral más esperada del G20, se concretó la tarde del sábado en un hotel porteño. Fue su primer encuentro cara a cara en más de un año. Compartieron una cena acompañados por ocho asesores cada uno.

La virtual cumbre, que se extendió por más de dos horas (estaba previsto que durara sólo una) fue calificada por ambas partes, según la Casa Blanca, como "altamente exitosa".

Ya antes del encuentro, Trump se había mostrado optimista. "Es muy especial la relación que tengo con el presidente Xi", dijo el norteamericano mientras ambos se sentaban. Y añadió: "Esta será una de las principales razones por las que probablemente acabemos obteniendo algo que será bueno para China y bueno para Estados Unidos".

Xi, por su parte, había expresado a través de un traductor: "Solo con la cooperación entre nosotros podemos servir el interés de la paz y la prosperidad mundial y es por eso que esperaba con interés esta reunión".

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Entre las demandas clave de los Estados Unidos se encuentran un alto en lo que la administración llama robo generalizado de propiedad intelectual y transferencia forzada de tecnología por parte de China.

Justamente, según la Casa Blanca, en el acuerdo que alcanzaron en Buenos Aires, los mandatarios se comprometieron a "iniciar inmediatamente negociaciones" para alcanzar "cambios estructurales con respecto a transferencia forzada de tecnología, protección de la propiedad intelectual, barreras no arancelarias, intrusiones y robos cibernéticos, servicios y agricultura".

La intención es que esas negociaciones estén finalizadas "dentro de los próximos 90 días". Y entonces sí, si no hay acuerdo, "los aranceles pasarán del 10% al 25%".

Apenas conocido el acuerdo, los medios internacionales especularon sobre la reacción positiva que generará en los mercados el lunes.

En los hechos, el encuentro bilateral entre los mandatarios de las dos mayores economías del mundo era el evento al que más atentos estaban en el exterior de entre todos los que ocurrieron en el marco de la cumbre de líderes del G20 celebrada en Buenos Aires este viernes y sábado.

"Fue un encuentro increíble y productivo, con posibilidades ilimitadas tanto para los Estados Unidos como para China. Es un gran honor trabajar con el presidente Xi", manifestó Trump a través del comunicado de prensa.