Sigue el terremoto político en Brasil: ahora hablan de adelantar las elecciones para reemplazar a Dilma

Recorte del mandato presidencial de Dilma Rousseff y elecciones anticipadas en octubre son las opciones que, aunque parezcan drásticas, están analizando desde la oposición y el oficialismo en Brasil a raíz de la crisis política que atraviesa el país y que tiene a toda la dirigencia pendiendo de un hilo.

En un nuevo capítulo en la turbulenta actualidad brasileña, dos pesos pesados del Senado se mostraron a favor de convocar a elecciones anticipadas para el mes de octubre.

Renan Calheiros, presidente de la Cámara alta y miembro del PMDB -el partido que rompió su alianza con el Gobierno-, opinó favorablemente sobre la propuesta de otro senador de su partido, Valdip Raupp, quien puso a consideración el llamado anticipado de elecciones. 

"Sinceramente, veo con buenos ojos esto de las elecciones generales. Creo que si la política no arbitra una salida para Brasil, no podemos cerrar todas las puertas y dejar de discutir cualquier otra alternativa, como esto de las elecciones generales, o para hacer una revisión en el sistema de gobierno", le dijo Calheiros a periodistas locales.

En este mismo sentido opinó Humberto Costa, líder de la bancada del Partido de los Trabajadores (PT) en el Senado, quien afirmó en diálogo con Rádio Jornal que su partido no descarta convocar a comicios generales después de que finalice el proceso de juicio político en contra de la Jefa de Estado.

La presidenta Dilma Rousseff opinó sobre el asunto. Y deslizó una crítica al asegurar que, si los diputados y senadores están dispuestos a recortar su mandato -como debería hacerlo ella-, vuelvan a consultarla sobre la opinión que tiene sobre el proyecto. 

Pero la Primera mandataria no es la única que está en la mira de los legisladores, porque hoy, el juez de la Suprema Corte Marco Aurélio Mello le ordenó al presidente de la Cámara de Diputados, el ahora opositor Eduardo Cuhna, que debe dar lugar al pedido de juicio político de Michel Temer, el vicepresidente de Dilma y presidente del PMDB.

Temer está segundo en la linea de sucesión de Brasil, y debería asumir el cargo de la actual presidenta durante 180 días de forma interina si la Cámara de Diputados vota a favor de iniciar un juicio político en contra de la mandataria. Con esta orden del Tribunal Supremo, él mismo y su partido pierden poder de negociación y los planes de relevo de Rousseff de su cargo ya no son la única opción que analizan los políticos en Brasil.

La solicitud de juicio político contra Temer fue presentada por un abogado, Mariel Márley Marra, y rechazado por Cunha, pero el denunciante apeló al Tribunal Supremo y obtuvo el apoyo de Mello, quien alegó que la acusación es similar a la que llevó a iniciar el proceso a Rousseff.

La denuncia de Marra sostiene que el vicepresidente habría incurrido en el mismo "delito de responsabilidad" que Rousseff al firmar algunos de los decretos que facilitaron unas maniobras contables dentro del presupuesto de 2014 y 2015, argumento central de la acusación que analiza actualmente la Cámara de Diputados en el proceso contra la Primera mandataria.

Sin embargo,el presidente de la Cámara de Diputados Eduardo Cuhna, que integra el Partido del Movimiento Democrático de Brasil (PMBD) que lidera Temer y que la semana pasada abandonó la coalición gobernante, se había negado a aceptar las acusaciones contra su jefe partidario, después de haber admitido las que se hicieron contra Rousseff.

Temas relacionados
Más noticias de Brasil
Noticias de tu interés