México, Uruguay y Rusia condenan el "golpe de Estado"

El gobierno de México afirmó hoy que los acontecimientos registrados el domingo en Bolivia constituyen un "golpe de Estado" porque el presidente de ese país, Evo Morales, presentó su renuncia después de que se lo pidiera el Ejército y "para evitar una guerra civil".

En rueda de prensa, el ministro de Exteriores mexicano, Marcelo Ebrard, resaltó que después de que la Organización de Estados Americanos (OEA) dio a conocer su informe preliminar sobre las elecciones del 20 de octubre y pidió la repetición de los comicios, "Morales propuso realizar nuevas elecciones" apostando con ello por resolver por esta vía "los diferendos existentes".

"Posteriormente, el Ejército pidió la renuncia del presidente y el presidente Morales resolvió presentar su renuncia para evitar una guerra civil", indicó Ebrad, para quien "por consiguiente es un golpe" puesto que al pedir la renuncia del mandatario el Ejército "violenta el orden constitucional en el país".

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, suscribió todo lo dicho por Ebrard sobre Bolivia, reconoció expresamente la actitud responsable de Morales que prefirió renunciar antes que exponer al “pueblo a la violencia.

Citado por europapress, Ebrard sostuvo que "los golpes militares nunca han traído nada positivo, suspenden la vida democrática, los derechos de las personas y, por consiguiente, estamos muy preocupados". Según el canciller, lo sucedido en Bolivia constituye "una grave retroceso para la vida democrática" en el continente.

México sigue atento a la evolución de los acontecimientos en Bolivia ya que además, existen 10.000 mexicanos en la nación sudamericana.

Más países denuncian golpe

También Uruguay, Nicaragua, Cuba, Venezuela y Rusia condenaron el "golpe de Estado" en Bolivia, mientras que EE.UU. consideró "crucial" que sean civiles quienes tomen el control del gobierno. "De acuerdo con la Carta Democrática Interamericana, es crucial que el liderazgo civil designado constitucionalmente mantenga el control durante la transición", dijo un portavoz del Departamento de Estado para el Hemisferio Occidental y añadió que EE.UU. apoya una nueva convocatoria electoral en Bolivia "libre y justa".

El gobierno de España condenó la actuación de las FFAA y la Policía en Bolivia, al considerar que su acción distorsionó el anuncio de Morales de que repetiría las elecciones y forzó la dimisión de ese presidente, mientras el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, reiteró su postura de que lo sucedido no fue un golpe.

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