Día Mundial sin Tabaco: una nueva razón para dejar de fumar

El tabaco es una de las mayores amenazas para la salud pública que ha tenido y tiene que afrontar el mundo. Mueren más de siete millones de personas al año, de las cuales más de seis son consumidores directos y alrededor de 890.000 son no fumadores expuestos al humo ajeno, según expone la Organización Mundial de Salud (OMS) en sus informes recientes.

Hoy, 31 de mayo, se celebra el Día Mundial sin Tabaco, una ocasión y una excusa para tratar de dejar de fumar, hábito que suele llevar a los fumadores a padecer algún tipo de cáncer o a depender de una botella de oxígeno para toda su vida. 

En este marco, el lema de este año se enfoca en El Tabaco y la Salud Pulmonar, y se centra en las consecuencias negativas para la salud y la importancia del cuidado de nuestros pulmones para la salud y bienestar de las personas.

Argentina no escapa a esta lógica mundial y según se desprende de documentos de la secretaria de Salud de la Nación, el 20% de los mayores de 18 años fuma de manera directa.

Más allá de que todavía es un número considerable (fuma 1 de cada 5 argentinos) es importante resaltar que gracias a las campañas públicas realizadas en los últimos años -que impiden fumar en ciertos lugares, restringen la publicidad y obligan a las empresas tabacaleras a dar cuenta en los paquetes sobre las consecuencias de salud que trae aparejado fumar- sumado a una mayor conciencia saludable, hay más de 1 millón de argentinos que han dejado de fumar en la última década.

Según explican los médicos de la Asociación Argentina de Cardiología, dejar de fumar disminuye los riesgos de padecer enfermedades asociadas; mejora la circulación y la función pulmonar; disminuye la tos y la falta de aire; baja el riesgo de infecciones; el riesgo de enfermedad coronaria disminuye a la mitad y mejora la energía; entre otras cuestiones. Los beneficios de dejar de fumar comienzan rápidamente y se multiplican con el tiempo.

Lo cierto es que dejar de fumar es posible. Para ello es importante que cada fumador registre cuántos cigarrillos fuma en un día; identifique los horarios, actividades o situaciones que motivaron su deseo de fumar. Con esto cada persona podrá identificar cuáles son las actividades y situaciones que más le despiertan los deseos de fumar e incluso evaluar el gasto económico.

La sensación intensa del deseo de fumar dura sólo 1 o 2 minutos. Estas situaciones serán cada vez menos intensas y menos frecuentes en la medida que avancen los días sin fumar. Es muy importante buscar u organizar un sistema de apoyo entre quienes le rodean, pero también evitar situaciones con personas que, sin quererlo o no, puede dificultarle la tarea. En especial durante los primeros días puesto que son los más difíciles.

El proceso de abandonar el consumo de tabaco arranca cuando se toma la decisión. Existen diferentes opciones para lograr este objetivo, pero lo cierto es que en cada persona puede funcionar una distinta.

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