

El sistema de pago en los peajes de la Argentina avanza hacia un cambio definitivo: el uso de efectivo comienza a quedar atrás y el TelePASE se consolida como la herramienta central para circular por las autopistas concesionadas. La medida alcanza, en esta etapa, a todas las trazas bajo la órbita de Autopistas Urbanas Sociedad Anónima (AUSA) y se enmarca en un proceso más amplio de modernización vial.
El esquema apunta a eliminar progresivamente las cabinas tradicionales y reemplazarlas por tecnología de lectura automática, con el objetivo de agilizar el tránsito y reducir los tiempos de espera en los accesos más transitados.
Qué autopistas dejan de aceptar efectivo
El cambio ya rige para las autopistas 25 de Mayo, Perito Moreno y Arturo Illia, todas bajo concesión de AUSA. En estos corredores, el pago manual deja paso al sistema TelePASE, que permite el cobro automático sin necesidad de detener el vehículo.
La iniciativa forma parte del plan “Autopistas Inteligentes”, que prevé una transformación integral del sistema de peajes mediante tecnología de identificación vehicular y cobro electrónico.

Cómo usar TelePASE con billeteras virtuales
Para quienes no cuentan con una cuenta bancaria tradicional, existe la posibilidad de utilizar TelePASE a través de billeteras virtuales. Una de las opciones disponibles es Mercado Pago, que permite abonar los peajes con dinero en cuenta o con tarjetas asociadas.
El procedimiento contempla tres pasos básicos: solicitar el TAG, colocarlo en el parabrisas y vincularlo desde la aplicación. El dispositivo puede pedirse desde la cuenta digital, retirarse en puntos habilitados o adquirirse a través de canales oficiales. Quienes ya cuentan con el TAG deben asociarlo a la billetera desde la app para habilitar el cobro automático.
La eliminación del efectivo no se limita al ámbito porteño. A través del Decreto 733/2025, el Gobierno estableció que antes del 31 de diciembre de 2026 todas las rutas nacionales concesionadas deberán contar con un sistema de TelePASE garantizado por la Dirección Nacional de Vialidad, bajo la órbita de la Secretaría de Transporte del Ministerio de Economía.
El objetivo es unificar el esquema de cobro en todo el país y avanzar hacia un modelo de circulación más ágil y automatizado.
En la Ciudad de Buenos Aires, el proceso de modernización incluye además la implementación del sistema Free Flow en algunas autopistas. Este modelo permite circular sin detenerse ni reducir la velocidad, gracias a arcos equipados con lectores de patentes que identifican automáticamente a los vehículos.
Con este esquema, ya no es necesario contar con una oblea adhesiva en determinados accesos, ya que el sistema reconoce la patente y asigna el cobro al titular registrado, simplificando el tránsito y el pago del peaje.





