Advierten a la Gendarmería por métodos utilizados para disuadir manifestaciones

El Centro de Estudio Legales y Sociales sostuvo que los métodos represivos usados por esa fuerza contra los choferes de la línea 60 están prohibidos. Denunciaron que “en el operativo la Gendarmería disparó balas de goma de manera indiscriminada”.

El Centro de Estudio Legales y Sociales (Cels) advirtió hoy que los métodos represivos usados por la Gendarmería contra los choferes de la línea 60 están prohibidos por los "criterios mínimos” dispuestos por el ministerio de Seguridad para que las fuerzas federales dispersen a los participantes en protestas.

El Centro de Estudios Legales y Sociales (Cels) desautorizó de este modo al secretario de Seguridad, Sergio Berni, quien dijo que ordenó desalojar a los trabajadores que se manifestaban esta mañana en la Panamericana utilizando los ‘protocolos‘ a los que deben apelar las fuerzas de seguridad.

El organismo denunció en un comunicado que “en el operativo la Gendarmería disparó balas de goma de manera indiscriminada hacia los manifestantes, inclusive desde arriba de la Panamericana hacia trabajadores que estaban en la ruta 197”.

El uso de las balas de goma para dispersar a los participantes de las protestas “está prohibido por los Criterios Mínimos para el Desarrollo de Protocolos de Actuación de los Cuerpos Policiales y Fuerzas de Seguridad Federales en Manifestaciones Públicas, sancionados por la resolución 201-11 del ministerio de Seguridad de la Nación”, sostuvo.  

“La Gendarmería utilizó pistolas lanzagases y agresivos químicos cuyo uso para evitar el corte del tránsito también está prohibido por la misma resolución”, agregó. El Cels confirmó que a raíz de este accionar de la Gendarmería “alrededor de 20 personas fueron heridas, entre ellas participantes de la protesta y trabajadores de prensa”.

El Cels cuestionó que el operativo de esta mañana en la Panamericana se haya puesto en marcha “sin antes promover un canal de negociación”.

Este conflicto laboral, que se profundizó en junio de este año a partir del despido de 53 trabajadores por parte del grupo DOTA SA, requiere la apertura de espacios de diálogo que faciliten su resolución política y no del uso de la violencia contra los manifestantes, observó el centro.

 

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