La gigante Gold Fields desembarca en Perú

La minera sudafricana Gold Fields, la segunda mayor productora de oro en su país de origen y la cuarta del mundo, se quedó con el 92% de las acciones de la peruana sociedad La Cima, de Cerro Corona, que explota yacimientos de oro y cobre, y hasta ahora pertenecía al grupo familiar Gubbins. La propiedad adquirida por Gold Fields equivale al 8% de la mina más grande que la sudafricana opera en su país. Los compradores se excusaron de informar el monto desembolsado en la operación.

Los nuevos dueños de la mina, un gigante que produce 4,33 millones de onzas de oro al año, espera que La Cima le aporte un 3,5% de su producción total. Según los estudios de viabilidad realizados en agosto de 2003, el gasto de capital inicial que deberá desembolsar Gold Fields para desarrollar La Cima asciende a unos 115 millones de dólares. El grupo podría obtener una producción de 147.000 onzas de oro al año, con un costo de u$s 212 por onza. La mina peruana también aportaría 65 millones de libras de cobre, con un gasto de u$s 0,48. El proyecto de explotación tendrá una vida útil de 12 años y un plazo de construcción de 18 meses.

Hasta ahora, Gold Fields sólo tenía operaciones internacionales en Australia y Ghana. Ahora, dispone de un plazo máximo de 15 meses para concretar el acuerdo definitivo. “Depende de la adquisición de los derechos de superficie necesarios, la aprobación del estudio de impacto ambiental y la emisión de los permisos de construcción , explicó Howard Stevenson, el gerente de desarrollo de negocios de Gold Fields.

Por su parte, el presidente de la compañía, Ian Cockerill, declaró que “la transacción está en línea con nuestra estrategia de realizar, a largo plazo, inversiones de categoría mundial en las mayores zonas auríferas del mundo .

La Cima es una unidad que se formó este año, luego de que la minera peruana Corona decidiera dividir sus activos. La familia Gubbins posee, además, operaciones en las unidades mineras Morococha y Yaucicocha, en la zona central de Perú. Esta última es una de las 10 minas de oro más grandes del mundo, y pertenece a la estadounidense Newmont y a la peruana Buenaventura.



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