NEGOCIAN SINDICATOS ‘GORDOS’ CON DISIDENTES

La CGT se une para hablar con Kirchner

Las dos CGT, la oficial y la disidente, se sienten huérfanas frente a un Gobierno que avanza en medidas que son sus reivindicaciones históricas, pero sin comentar las medidas con ellas, por eso buscarán llegar a la unidad en marzo o abril próximo, aunque en etapas.

A la vez, la CGT disidente considera que desaparecieron los obstáculos para la unidad, al no regir el modelo de flexibilización laboral y, por ende, el apoyo de los sindicatos gordos a políticas que para los seguidores de Hugo Moyano son inaceptables, según dijo a El Cronista Juan Manuel Palacios.

Para llegar a marzo habiendo dado espacio a todos los gremios a dar su opinión, se realizará un plenario de secretarios generales el 11 y 12 de diciembre, según se decidió ayer en el sindicato de los peones de taxis de Omar Viviani, asado y agua mineral de por medio.

Pero antes habrá otra reunión de la Comisión de Unidad del Sindicalismo el 26 de noviembre, para ultimar los preparativos. En estos encuentros participan entre otros, Rodolfo Daer (alimentación), Armando Cavalieri (comercio) y Andrés Rodríguez (estatales), por la CGT oficial, y Moyano (camioneros), Palacios (colectiveros) y Julio Piumato (judiciales).

Las versiones sobre lo charlado en el almuerzo de ayer difieren. Para Andrés Rodríguez se resaltó el documento redactado en el estadio de Ferro, durante el último intento de unidad, “que nos contuvo a todos . Pero no se habló de que ese esfuerzo terminara en un nuevo alejamiento a los pocos meses de Moyano.

Para otro de los sindicalistas gordos “se entró en la anécdota de que no se puede hacer una unidad y después irse. En una CGT unificada tiene que haber disenso y acuerdo, pero sin que nadie se vaya .

Desde la otra vereda, Palacios respondió que “nos fuimos porque no se respetaron las políticas planteadas, y la CGT oficial apoyó la flexibilización laboral. Pero con el actual Gobierno el contexto es otro .

Cavalieri planteó que “la CGT debe unirse para tener capacidad de gestión, e incidir en las políticas salariales o impositivas que hacen al poder adquisitivo de los trabajadores, al igual que en las de salud .

Otro sindicalista de los gordos desmintió que el sector busque la unión con la CGT disidente porque ésta tiene más llegada al gobierno del presidente Néstor Kirchner, y reivindicó que tanto el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, como los ministros de Economía, Trabajo, Salud e incluso Planificación los escuchan permanentemente. “El único que tiene llegada a Kirchner es Moyano, y no toda la CGT disidente , apuntó.



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