LA MANDATARIA DEFIN A ANOCHE CON SUS COLABORADORES SI CONCRETA LA VISITA O SUSPENDE

Duda Cristina de viajar a España, pero no quiere desairar al Rey

Hasta anoche, no había confirmación del viaje de CFK a Madrid, previsto para la semana próxima para asistir a Cumbre de Civilizaciones.El Rey le pidió que asista

La presidenta Cristina Kirchner retomó ayer sus funciones tras diez días de vacaciones en El Calafate y dedicó su primera jornada de actividad oficial a definir con sus más estrechos colaboradores si concreta o no el anunciado viaje a España la semana que viene para participar del Foro Alianza de Civilizaciones, una cumbre de países iberoamericanos organizada por el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y las Naciones Unidas.

Al cierre de esta edición, no había aún confirmación oficial de la visita que, de concretarse, tendrá obviamente un capítulo bilateral: Cristina mantendría audiencias con el rey Juan Carlos I y el jefe de gobierno, embarcado por estas horas en la campaña electoral con vistas a las elecciones del 9 de marzo.

“Siempre es importante un viaje a España, pero todavía no sabemos qué peso político el gobierno español le quiere dar a esta cumbre y si podemos compatibilizar las agendas. En base a ello, se decidirá si viaja Cristina o sólo el canciller Jorge Taiana, dijo anoche a El Cronista una fuente oficial. La cumbre –prevista para el martes y miércoles próximo en Madrid–tiene como tema central la política inmigratoria y la interconexión de las culturas diferentes. Al parecer, hubo un pedido expreso semanas atrás del propio rey Juan Carlos a Cristina para que asistiera a este foro, al que también fueron invitados otros mandatarios de la región. Y los Kirchner, se sabe, siempre se preocuparon por no desairar al monarca, con quien mantienen una buena sintonía.

Con todo, si bien es cierto que Cristina necesita también recuperar protagonismo internacional, tras la fallida operación de liberación de los rehenes de las FARC en Colombia que encabezó Néstor Kirchner (y dejó en una situación incómoda a la Argentina), a la mandataria también le preocupa el frente interno. De hecho, hay varias cuestiones locales que hicieron de su primer mes de gestión un período de bastante convulsión y que requieren su presencia en el país. A saber; al escándalo de la valija de los 800 mil dólares y la tensión con los EE.UU. se le sumaron en el arranque del año los problemas energéticos que tuvieron su correlato en los cortes de luz y de agua que afectaron distintos barrios de la Capital Federal y el conurbano.

Todos estos factores ponderó ayer Cristina junto al canciller Taiana y el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, para definir si participa de la cumbre madrileña. Fernández cenó anoche con los Kirchner en Olivos.

De viajar, sería su segunda visita internacional como mandataria, tras su participación en diciembre último en la Cumbre de presidentes del Mercosur en Montevideo, donde asumió la Presidencia pro témpore del bloque. En su primer día en Buenos Aires, Cristina no se movió de la residencia presidencial, donde se reunió con varios ministros, entre ellos Aníbal Fernández (Justicia) y Nilda Garré (Defensa). Recién a partir de hoy, la Presidenta atenderá en la Casa Rosada, donde a las 18 encabezará un acto en el salón Sur para presentar el Programa de Reconversión Ambiental, destinado al saneamiento de los efluentes de la cuenca Salí-Salado, que atraviesan las provincias de Santiago del Estero, Tucumán, Salta, Catamarca, Córdoba, junto a cinco gobernadores.

El viernes, en tanto, Cristina presidirá un acto en el que se presentará a Tigre como el primer municipio en implementar un plan nacional de uso racional de la energía y se anunciará que en un plazo de unos 40 días inaugurará una serie de obras ligadas al programa de ahorro energético del Gobierno.

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