

Luego de cuatro postergaciones por la falta de disponibilidad de usinas y algunas dudas de los interesados con respecto a los pliegos, tres empresas se presentaron para la licitación para la compra e instalación de cinco centrales de generación eléctrica convocada por Enarsa.
Construcciones Térmicas SA –sociedad conformada por la venezolana Inelectra y Conarsa, controlada de Electroingeniería-, la alemana Siemens en sociedad también con Electroingeniería y la española Isolux junto con la constructora local Iecsa, presentaron ayer sus ofertas, aunque ninguna de ellas lo habría hecho por todas las usinas a instalar, que buscan sumar 1.500 megavatios de potencia al sistema eléctrica nacional.
En plena crisis energética, durante el invierno, el Ministerio de Planificación lanzó sorpresivamente la licitación para la adquisición e instalación de cinco usinas a gas o combustible líquido, con una potencia entre 120 y 560 megavatios. El presupuesto anunciado es más que jugoso ($ 3.250 millones) y el destino de las centrales es Mar del Plata, Necochea, Campana y Córdoba.
Las empresas Ansaldo, Iecsa, Isolux, Construcciones Térmicas, Sadefem y Siemens compraron pliegos.
La primera fecha para presentar la oferta económica era el 28 de septiembre. Hubo una primera postergación a octubre, otra al 20 de noviembre, otra hasta comienzos de diciembre y una cuarta hasta ayer.
Según indican algunas fuentes, los tiempos de Planificación no pudieron coincidir con los de los técnicos de la petrolera estatal Enarsa –la convocante a la licitación– y con los de las empresas.
Otras fuentes indicaron que el apuro del Gobierno por anunciar gestión en plena crisis energética, llevó a armar unos pliegos que no son del todo claros y que dejaron dudas entre las empresas. Asimismo, el Gobierno habría estimado una disponibilidad de este tipo de maquinaria –cuya fabricación mundial se reparte en pocas manos– que tampoco terminó coincidiendo con sus tiempos.
Ahora hay cinco días hábiles para impugnar las ofertas y luego se abrirá el sobre 1 con la oferta técnica y más adelante el sobre 2 con la propuesta económica.
Por ahora, sin plazos preestablecidos para esto pero en el Gobierno, la intención es tener conectada alguna usina para el invierno, objetivo difícil de cumplir. Cuando se lanzó la licitación a mediados de este año, la fecha que se barajó para la puesta en marcha de las nuevas centrales era agosto de 2008. Ayer, el ministro De Vido, admitió el retraso y vaticinó que para 2009 se sumarán los 1.500 MW de las cinco centrales.