Los mercados vivieron otra jornada para el olvido y temen “viernes negro

Wall Street se desplomó 4,15%, mientras que el índice Eurofirst 300 finalizó abajo 1,2% y acumula desde el lunes un rojo de 3,1%, sus peores resultados semanales desde diciembre de 2016. En la región el Bovespa cayó 1,5% y el Merval retrocedio casi 2%.

La Bolsa de Nueva York sufrió hoy un notable retroceso y un verdadero derrumbe al perder 1.032 puntos y un 4,15 por ciento de su capitalización, con lo que profundizó la caída de los mercados europeos y desató fuertes temores sobre un nuevo ‘viernes negro‘ mañana en todos los mercados internacionales.

Media hora antes del cierre, el índice industrial Dow Jones perdía 2,94 por ciento, un porcentaje que en pocos minutos superó el 4 por ciento y hundió las esperanzas de un freno al desmoronamiento bursátil desatado la semana pasada y que ayer había remitido levemente.

Pero desde las primeras horas de la jornada, los mercados bursátiles europeos experimentaron un fuerte retroceso tras la leve recuperación de ayer y se derrumbaron más del 2 por ciento en Europa.

En Wall Street, los inversores se orientaron, finalmente, hacia la compra de bonos del Tesoro como refugio ante la volatilidad y la incertidumbre internacional.

El índice industrial Dow Jones terminó cerrando con una pérdida del 4,15 por ciento tras una jornada en la que los altibajos siempre se dieron en el terreno negativo, en tanto que el S&P 500 se dejó un 3,75 por ciento y el Nasdaq, de valores tecnológicos, también retrocedió un 3,90 por ciento.

A pesar de los buenos datos sobre el empleo en Estados Unidos que se dieron a conocer hoy, la Bolsa neoyorquina comenzó a operar con tendencia bajista, que no pudo revertir la noticia de que las peticiones semanales del subsidio por desempleo se redujeron en 9.000 la pasada semana, según el Departamento de Trabajo del Gobierno estadounidense.

Tampoco influyó favorablemente el cierre positivo de las plazas asiáticas (Tokio subió un 1,13 por ciento y Hong Kong un 0,42 por ciento) animadas por un buen dato de las importaciones chinas, como pudo verse apenas influyó en el inicio de la sesión del IBEX, que minutos después de la apertura se dio la vuelta y caía un 0,3 por ciento.

El ánimo decaído y temeroso de los inversores después de varias jornadas de caídas bursátiles y de creciente incertidumbre por el anuncio de la Reserva Federal de que habrá al menos tres subidas de la tasa de referencia durante 2018, volvió a meter presión sobre el mercado de Bonos del Tesoro estadounidense.

El rendimiento de los títulos a 10 años de plazo llegó a tocar un máximo del 2,9 por ciento bajo la presión de las ventas, pero la turbulencia en la Bolsa alentó a los inversores a volver a los Bonos del Tesoro empujando así a la baja sus rendimientos, que cerraron en 2,84 por ciento.

En Europa, mientras tanto, las acciones también fueron golpeadas por olas de ventas en la hora final de negociaciones bursátiles y el índice Eurofirst 300 finalizó con una baja del 1,2 por ciento, llevando sus pérdidas de esta semana al 3,1 por ciento, los peores resultados semanales desde diciembre de 2016.

El índice FTSE de la Bolsa de Londres finalizó la jornada con una caída del 1,49 por ciento, en tanto que el índice CAC 40 de la Bolsa de París perdió 1,98 por ciento y el DAX de la Bolsa de Frankfurt se dejó al final 2,62 por ciento.

En España, el IBEX 35 de la Bolsa de Madrid también se mostró en terreno negativo y cayó 2,21 por ciento, en tanto que las acciones en la Bolsa de Estocolmo retrocedieron 2,02 por ciento y las de Zurich lo hicieron en un 2,36 por ciento.

Madrid perdió la cota de 9.800 puntos, nivel de principios de marzo pasado, lastrada por las caídas de Wall Street y el desplome de los grandes valores del IBEX, con retrocesos que en algunos casos rozaron el 3 por ciento.

Con el riesgo país 69 puntos básicos, el IBEX 35, principal índice bursátil del país, cedió 220,6 unidades, ese 2,21 por ciento, hasta 9.756,3 enteros, con lo que ahonda en las pérdidas anuales que acumulan el 2,86 por ciento.

Por otra parte, el Banco de Inglaterra decidió hoy mantener los tasas de interés en 0,5 por ciento, en tanto que su homólogo europeo, el BCE, publicó su boletín económico en el que confirma el ‘fuerte ritmo de expansión económica‘ de la zona euro y confía en que este crecimiento llevará la inflación a su objetivo, cerca del 2 por ciento.

Además, hoy se conoció que Alemania obtuvo en 2017 un superávit comercial de 244.900 millones de euros gracias al récord que marcaron las exportaciones tras aumentar 8,3 por ciento respecto al año anterior..

Por otra parte, en el mercado cambiario el euro volvió a retroceder, lo cual tampoco contribuyó a frenar las caídas, que se ampliaron aún más al retroceder la moneda única a 1,2247 dólares tras haber tocado 1,25 dólares hace pocos días.

Finalmente, el precio del barril de Brent, el crudo de referencia europeo, disminuía hasta 64,53 dólares, los mismos niveles de diciembre de 2017. 

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