Más de 10.000 personas por mes ya pagan sus facturas de servicios con tarjeta de débito
"Esto evoluciona rápidamente", agrega. Menciona, por caso, la nueva billetera Rapipago, una aplicación orientada a la inclusión financiera que permite realizar envíos de dinero, recargar cualquier celular y pagar facturas sin necesidad de tener una cuenta bancaria. Se dirige a personas que aún no tienen acceso a servicios financieros, permitiendo a cualquier persona que se maneja en efectivo tener una cuenta de dinero electrónico.
"La conveniencia se resume en ahorro de tiempo, porque evita ir los días de vencimiento o aprovechar tiempos muertos, como un viaje en subte o colectivo. Es muy evidente en el caso de envío de dinero, donde no hace falta encontrarse personalmente para pagarle, se puede enviar dinero a cualquier parte del país", detalla Villegas.
El gran reto de la transformación digital en la industria financiera es la "innovación al servicio de las personas". El diseño de nuevos productos y servicios, como el "onboarding digital" o alta móvil, y el uso de la tecnología para potenciar la bancarización. "La experiencia del usuario a la hora de operar con un servicio financiero debe ser simple, fácil y colaborativa", destaca Jorge Larravide, Gerente Comercial de Red Link.
"La facilidad apunta al concepto de inclusión financiera. La simpleza está relacionada con el reemplazo del uso del dinero en forma física (billetes y monedas) por mecanismos de dinero electrónico, y lo colaborativo gira entorno al concepto de open banking y demás soluciones", completa.
Sabe que hay un nuevo segmento de consumidores de servicios financieros que sólo utiliza canales digitales, como celulares, tablets y computadoras. Se los denomina "omnidigitales" y ya representan el 46% de los clientes bancarios a nivel mundial -un gran salto respecto del 27% registrado en 2012-, de acuerdo con la Encuesta Global de Banca Digital 2017 elaborada por PwC. Hasta ahora, los bancos habían trabajado en ampliar su presencia digital a partir de las necesidades de los clientes omnicanales, es decir, aquellos que alternan entre visitas a las sucursales, banca online, call centers o banca móvil. Pero este comportamiento es cada vez menos frecuente: mientras que hace cinco años alrededor de la mitad de los clientes utilizaban todas las plataformas de contacto, actualmente la proporción se redujo a un tercio. Por el contrario, los clientes omnidigitales crecieron 19%.